Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explica que es importante tener un peso saludable para disminuir el riesgo de padecer diabetes. “Las personas que participaron en un estudio grande redujeron el riesgo de desarrollar diabetes en casi un 60% después de bajar aproximadamente el 7% de su peso corporal con cambios en la actividad física y en la dieta”, detalla.

Asimismo, la Asociación Americana de diabetes aconseja a las personas con prediabetes perder al menos el 7% o el 10% de su peso para evitar el desarrollo de la enfermedad.

En el caso de las personas que ya tienen un diagnóstico de diabetes, es muy valioso seguir las recomendaciones médicas para evitar complicaciones de salud, especialmente las relacionadas con la alimentación.

Según indica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, es fundamental comer alimentos variados saludables de todos los grupos alimenticios.

  • Granos integrales como trigo integral, arroz integral, cebada, quinua y avena.
  • Proteínas, como carnes magras, pollo, pavo, pescado, huevos, nueces, fríjoles, lentejas y tofu.
  • Productos lácteos descremados o bajos en grasa como leche, yogur y queso.

Tener una dieta sana contribuye al tiempo a combatir la obesidad naturalmente. “Cambiar los hábitos alimenticios es fundamental para perder peso y mantener un peso saludable. Para perder peso, es necesario consumir menos calorías y utilizar más calorías de las que se consumen”, explican los Centros para el control y la prevención de enfermedades (CDC).

Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, brinda algunos consejos para tener en cuenta al momento de preparar las comidas de personas con diabetes tipo 2. Cabe aclarar que se debe acudir a un nutricionista para recibir un plan de comidas específico, según la condición de cada individuo.

  • Incluir alimentos de todos los grupos alimenticios en cada comida.
  • Consumir alrededor de 550 gramos por día de verduras. Elegir frescas y no añadir salsas o sal.
  • Respecto a las frutas, recomienda comer hasta 320 gramos al día, no comerlas con azúcar añadida o jarabes. “Pruebe con manzanas, plátanos (bananos), bayas, cerezas, coctel de frutas, uvas, melón, naranjas, melocotones, peras, papaya, piña y uvas pasas. Beba jugos que sean 100% de frutas sin edulcorantes ni jarabes agregados”, indica Medline Plus.
  • Incluir hasta 184 gramos diarios de alimentos con proteína (carne, aves de corral, mariscos, huevos, fríjoles y guisantes, nueces, semillas y alimentos de soya procesados). “Seleccione cortes magros de carne de res, ternera, cerdo o animales salvajes. Recorte toda la grasa visible de la carne. Hornee, ase, cocine a la parrilla, hierva en lugar de freír”, indica la Biblioteca.

Diabetes

La diabetes es una enfermedad que se caracteriza por generar niveles altos de glucosa en la sangre. Esto ocurre debido a que el páncreas no produce insulina, la hormona encargada de transportar la glucosa a las células del cuerpo para usarla como energía.

Existen tres tipos de diabetes. La tipo 1, que se caracteriza por ser la menos común, se puede presentar en cualquier edad (niños, jóvenes y adultos) y sucede cuando hay producción deficiente de insulina o la hay en cantidades mínimas. La de tipo 2 es la más común y sus síntomas son silenciosos, por lo que algunas personas no saben que padecen la enfermedad y aumenta el riesgo de complicaciones en su estado de salud. Por último, está la diabetes gestacional que, como su nombre lo indica, sucede durante el embarazo y aumenta las complicaciones durante el parto; además, incrementa el riesgo de que la madre y el hijo presenten diabetes de tipo 2 en el futuro.