Hace varios años que los frutos secos han tomado protagonismo en las rutinas de alimentación saludable. Y es que cómo no, si el cacahuate, las avellanas, las almendras, los pistachos, los marañones, los piñones, la nuez de la India y la nuez de macadamia, son aliados perfectos en la dieta, si se consumen en pequeñas cantidades y cuando no se es alérgico a ellas.

Además, estos frutos secos suministran fibra y grasas buenas que ayudan a cuidar la salud del corazón y proporcionan minerales, como selenio, magnesio y zinc. Así mismo, contienen vitaminas del complejo B, por lo que aportan excelentes beneficios para la salud en general, según el portal Tua Saúde.

Por su parte, las avellanas son originarias de Asia y se han convertido en un fruto seco muy consumido y apreciado debido a sus virtudes nutricionales y a su característico y sinigual sabor. Por esta razón, la han incluido en varias recetas gourmet alrededor del mundo.

Las avellanas aportan aproximadamente 655 kcalorías por cada 100 gramos.

Según la tienda ecológica EcoGricultor, las avellanas aportan aproximadamente 655 k/calorías por cada 100 gramos. Además, en cuanto a macronutrientes, están compuestas por carbohidratos en 7 %, proteína vegetal en 7 %, y en un 76 % por grasas, principalmente omega 9; en cuanto a micronutrientes, aportan vitaminas B9, A, B3 o niacina y C o ácido ascórbico.

Cabe resaltar que existe un gran problema de malnutrición en la sociedad y más aún en los adultos mayores, que no ingieren ciertos nutrientes claves debido a dificultades a la hora de comer; problemas de apetito, aumento de las necesidades energéticas, el déficit en la absorción de nutrientes, como puede ser en el caso de personas con enfermedad de Parkinson, según el portal Geriatricarea.

Por esta razón, es fundamental en la dieta de las personas mayores los frutos secos ya que son una fuente importante de ácidos grasos monoinsaturados como el Omega 3 y proteína vegetal, que son fundamentales para mantener el cuerpo en buenas condiciones con el paso del tiempo. Aquí algunas propiedades y beneficios de las avellanas en adultos mayores:

Propiedades nutricionales y beneficios del consumo de avellanas

  • Las avellanas retrasan el envejecimiento debido a su estupendo aporte en antioxidantes.
  • Gracias a su contenido en fibra, estos frutos secos reducen los picos de glucosa en sangre.
  • Pueden ser muy beneficiosas para reducir el síndrome premenstrual.
  • Las avellanas son un alimento que combaten la debilidad, cansancio físico y mental y favorecen el funcionamiento de nuestro sistema nervioso central y periférico.
  • Uno de los aminoácidos (proteína vegetal) que contienen las avellanas, la arginina, contribuye al buen funcionamiento del sistema cardiovascular, del sistema inmunológico e interviene en la formación de tejido.
  • Las avellanas son beneficiosas para mantener el tono muscular, estabilizar el ritmo cardíaco, prevenir la hipertensión, cuidar los vasos sanguíneos y favorecer la vasodilatación.
  • Estos frutos secos son excelentes para contribuir a cuidar los dientes y huesos.
  • Las grasas de las avellanas son cardiosaludables, pero además, junto con la fibra que contienen, las avellanas tienen un efecto saciante.
  • Ayudan a prevenir la anemia ferropénica.
  • Las avellanas son beneficiosas para mejorar el rendimiento intelectual y favorecer la memoria.
  • Al ser fuente de B9, son muy buenas durante el embarazo para prevenir daños neuronales en el feto. También, las avellanas aumentan la formación de leche materna.
  • Las avellanas contribuyen a la formación de glóbulos blancos, la defensa del organismo ante patógenos.