El envejecimiento es una etapa normal de la vida que no se puede evitar, pero existen algunos factores que si se pueden mitigar para evitar la aparición temprana de líneas de expresión o arrugas, que después de los 25 años se hacen más notorias debido a la falta de producción de colágeno.
Como tal, la vejez es un proceso que no solo influye en la salud de la piel, sino en la de otros órganos del cuerpo; por eso, los profesionales de la salud hacen énfasis de manera constante en la importancia de alimentarse bien, llevando a cabo un plan de alimentación en el que estén presentes alimentos de todos los grupos (proteínas, carbohidratos en su estado natural, frutas, verduras y grasas saludables).
Además de esto, es importante practicar algún deporte o realizar alguna actividad física con frecuencia y también es crucial dormir el número de horas adecuadas para la edad durante la noche y evitar episodios de estrés frecuentes.
Otra forma de prevenir el envejecimiento prematuro es incluyendo a la dieta superalimentos como la coliflor, un vegetal que se destaca como una de las pocas verduras blancas ricas en fibra dietética, vitamina C, vitamina K, potasio y ácido fólico. También contienen muchos compuestos orgánicos que protegen las ramas de los vasos sanguíneos del corazón, en donde la inflamación es muy frecuente.
De acuerdo con el portal web La Verdad Noticias, las sustancias orgánicas de la coliflor ayudan a desactivar las sustancias cancerígenas y a detener el crecimiento y la propagación del cáncer.
Otros beneficios de la coliflor
- Reduce la inflamación: gracias a sus ácidos grasos como el omega-3 y la vitamina K, este vegetal ayuda a prevenir la inflamación crónica del organismo, reduciendo condiciones como la artritis, el dolor crónico y ciertas condiciones intestinales.
- Cuida la salud renal: la coliflor contiene abundante agua, aunque también presenta un alto contenido de potasio y un bajo aporte de sodio que lo hace un alimento diurético y depurativo. Por lo anterior, esta verdura favorece la eliminación del exceso de líquidos en el organismo y también es beneficiosa para aquellas personas que sufren de hipertensión, retención de líquidos y la eliminación de líquidos y desechos como el ácido úrico.
- Beneficia el embarazo: al ser una fuente de folatos, la coliflor participa en la producción de glóbulos rojos y blancos, en la síntesis de material genético y en la formación de anticuerpos del sistema inmunológico. Por ello, su consumo resulta de gran interés para las mujeres en estado de embarazo, dado que una buena cantidad de ácido fólico (B9), es necesaria para esta etapa de la vida.
- Ayuda a la digestión: gracias a su contenido de fibra que le confieren propiedades laxantes, ayuda a prevenir el estreñimiento. De hecho, cuando se consigue consumir una buena cantidad de fibra en la dieta, se ayuda a mantener las cosas moviéndose suavemente a través de los intestinos. En ese sentido, la coliflor también contiene un compuesto llamado glucoraphin, que protege el estómago y los intestinos de ciertas condiciones de salud como el cáncer y las úlceras.
Ahora bien, es importante tener presente algunos efectos secundarios que puede tener la ingesta en grandes cantidades de la coliflor. Por ejemplo, uno de ellos es el aumento de la producción de gases intestinales, pues la fibra y los carbohidratos que contiene este vegetal no se descomponen por completo en el tracto digestivo y esto es lo que provoca la hinchazón abdominal, la producción de gases.
Asimismo, el consumo excesivo de la coliflor puede conducir a distintos problemas de salud, como la acumulación de ácido úrico en el cuerpo, que suele ocasionar afecciones como los cálculos renales y la gota.