Uno de los grupos de alimentos que han ganado relevancia para la salud son los frutos secos. La Clínica de Mayo los cataloga como una buena fuente de fibra que actúa en el organismo y, a partir de ello, influye positivamente en algunas afecciones.

Hay varios frutos secos, pero las nueces de macadamia se llevan en protagonismo al momento de hablar sobre la mejora en enfermedades vinculadas al colesterol.

De acuerdo con datos compartidos por el portal Terra, la nuez de macadamia es utilizada para consumirse a diario y contribuir en la digestión, especialmente para aquellas personas que sufren de estreñimiento. Sin embargo, su aporte puede ir más allá.

La Vanguardia consigna que se trata de un fruto seco que contiene nutrientes y proteínas, las cuales, algunas, son similares a las del aceite de oliva. En ese sentido, con la comparación del líquido natural, se da a conocer que la nuez de macadamia es rica en omega-3.

Los expertos explican que al proporcionar este ácido graso al cuerpo, previene problemas cardiovasculares y de colesterol.

fruto seco de forma esférica, color blanco crema. Foto: Getty Images. | Foto: Gabor Izso

El sitio web Geosalud indica que hay estudios, los cuales llegaron a la conclusión de que consumir un puñado diario de nueces de macadamia ayuda a reducir los niveles de colesterol malo, que conduce a la acumulación de “placa en las arterias”, según Medlineplus.

Una investigación efectuada por académicos de la Universidad de Penn State (EE. UU) y la Universidad de Guelph (Canadá), reclutó a dos docenas de personas, entre hombre y mujeres, para efectuar un estudio de caso en el que hubo un análisis dietario estadounidense común, en comparación con una dieta que contenía 42,5 gramos de nueces de macadamia.

Los pacientes se adaptaron al plan alimenticio por cinco semanas y, aunque “la energía total y el contenido de grasa fueron iguales en ambas dietas”, se encontró que las concentraciones de colesterol LDL -malo- fueron más bajas, en al menos un 10 %, para aquellos que siguieron la ingesta con el fruto seco, bajo el estándar de una dieta promedio en los Estados Unidos.

En adición, también se halló una mejora en las tasas de colesterol HDL -bueno- y colesterol total. Por otro lado, los niveles de triglicéridos no tuvieron ningún cambio.

Por su parte, Terra comparte la idea de que la nuez de macadamia es un fruto que se destaca por “su elevada proporción proteica e hidratos de carbono”, así que esto también se adjunta a la prevención del desarrollo de colesterol, condición que obstruye el flujo de la sangre, según los especialistas.

El colesterol es importante, pero, si su presencia en la sangre está por encima de los niveles considerados normales, produce hipercolesterolemia. Foto: Getty Images. | Foto: Foto: Getty Images.

De igual manera, el blog de Cuerpo Mente destaca que la nuez de macadamia es uno de los productos con mayor contenido en grasa. En cifras porcentuales, explican que “representan del 75 al 80 % de su peso y el 80 % del valor calórico”.

Entre las vitaminas que más otorga el consumo de este fruto seco se encuentran las del grupo B, principalmente la niacina y tiamina. Respecto a los minerales, el citado blog posiciona de primeras al manganeso, ya que con 30 gramos del fruto se podría encontrar más del 50 % de este mineral en las proporciones diarias que necesita el cuerpo. Asimismo, se recalca que posee poco sodio.

Nuez de macadamia en la cocina

Diversos portales gastronómicos dicen que las modalidades de preparación de la nuez de macadamia es frita o cocida, pero comúnmente se ingiere cruda.

Su sabor es mantecoso y tiene un pequeño toque de coco, suele ser utilizada para combinar con helados, en preparaciones de repostería y patés veganos. Por otro lado, también se puede moler para crear una harina de nuez de macadamia.