El 2021 ha sido declarado por la Organización de las Naciones Unidas como el Año Internacional de la Economía Creativa para el Desarrollo Sostenible, una celebración que busca promover actividades económicas basadas en el patrimonio artístico y cultural.
En Colombia, el ministro de Cultura, Felipe Buitrago, aseguró que su gestión estará centrada en acelerar la implementación de la Ley ReactivARTE, que contempla un paquete de inversiones para recuperar miles de empleos en este sector y reactivarlo, tras la pandemia de la covid-19.
Alejandra Borrero, reconocida actriz y una de las abanderadas del arte y la cultura en el país, también ha tenido que reinventar su oficio durante este último año. Casa E, su proyecto insignia, ya completó un año con las puertas cerradas, y cuando pueda volver a abrirlas será un espacio diferente al conocido hasta ahora.
“Esta pandemia nos ha mostrado que el lugar no es tan importante, lo importante realmente es ver el arte. El arte es alimento para el espíritu”, asegura Alejandra en este nuevo episodio de Megatendencias, un pódcast sobre lo que nos pasa hoy, conducido por Claudia Lucía González Osorio, editora del Grupo Semana.
Borrero cuenta cómo ha sido mantenerse a flote, viviendo del arte durante la pandemia, y los retos que vienen a futuro para lograr reactivar el sector. “El arte ha retrocedido en Colombia años y años, creo que muchos espacios no se van a volver a abrir, y eso es muy triste”, dice.
Durante los últimos meses, Alejandra pudo hacer teatro en la virtualidad y empezó a trabajar en el Laboratorio Creativo Casa E, un proyecto en el que niños, jóvenes y adultos pueden experimentar con sus habilidades artísticas. “Dentro de esta pandemia, tener la libertad de viajar por el mundo, por medio del arte, es una posibilidad de no caer en tristezas, depresiones y ansiedades”, asegura.
Reflexiona sobre los aprendizajes y enseñanzas que la pandemia ha traído a su vida y que la han impulsado a hacer cosas nuevas y a romper paradigmas. “No ha habido nadie que no tenga una lección aprendida en este camino. Son lecciones inolvidables que me han hecho un mejor ser humano”, dice, en medio de la tristeza que le ha dejado una pérdida familiar..
Además, habla sobre su rol como activista por los derechos de las mujeres, en una época en la que se han incrementado los índices de violencia intrafamiliar y en la que el desempleo ha afectado en mayor medida a las mujeres. Una lucha que hace algunos años decidió trasladar a los sets de grabación y a las producciones en las que participa.
“En mis charlas siempre pido perdón por haber incentivado a mantener los imaginarios que perpetúan la violencia. Al final de una novela la antagonista siempre recibe su castigo y ninguna mujer merece castigo”, puntualiza.
Los invitamos, entonces, a escuchar este episodio y a compartir su retroalimentación en nuestras redes sociales.