La estructura ósea está recubierta de músculos y a la vez protege los órganos y almacenan el calcio que requiere el organismo. Además, liberan dicho mineral a otros órganos cuando estos los necesitan para otros usos o funciones.
Según la biblioteca médica Medlineplus, una molestia en los huesos se puede presentar a raíz de una fractura después de un accidente, o por cuenta de una enfermedad crónica. Por ello, aconseja consumir suficiente calcio y vitamina D que los mantengan sanos.
Así mismo, los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por su sigla en inglés), informan que “hacer suficiente ejercicio y tener hábitos saludables ayuda a mantener los huesos sanos”. Entre dichos hábitos se encuentran el ejercicio constante y una alimentación balanceada.
También, al presentar dolor o tener síntomas como de cansancio, fracturas u otras señales asociadas a los huesos, es necesario consultar con un especialista para que recete el tratamiento adecuado teniendo en cuenta las comorbilidades de cada individuo o la gravedad de enfermedad desarrollada o la lesión presentada.
Además, se puede consultar con un especialista por aquellos remedios naturales que pueden ayudar a fortalecer los huesos. Por ejemplo, el portal especializado Mejor con salud explicó como realizar un batido que, con ingredientes naturales, contribuya a la salud del sistema óseo.
Los productos necesarios para realizarlo son: un vaso de bebida de almendras (200 ml), tres nueces, 10 cerezas, una yema de huevo y una cucharada de miel (25 g).
Preparación:
1. Lavar las cerezas y retirar la cáscara de las nueces.
2. Separar la clara del huevo de la yema.
3. Poner todos los ingredientes en la licuadora.
4. Procesar hasta obtener una mezcla homogénea.
5. Beber en las mañanas y, si no es posible encontrar cerezas, reemplazar con fresas.
Además de lo anterior, el portal especializado en gastronomía GastroLab listó una serie de alimentos que ayudan a fortalecer los huesos y combatir el desarrollo de osteoporosis:
- Semillas y frutos secos: las semillas de sésamo son recomendadas para fortalecer los huesos por el calcio que contienen. En cuanto a los frutos secos, se aconsejan los higos, pues el aporte individual de calcio por cada higo es de 13 miligramos por cada 241 miligramos.
- Hígado de vaca: aunque no es el preferido de muchas personas, se puede incluir en la dieta para obtener vitamina D y ayudar a procesar el calcio que se consume en el organismo.
- Soya: el porta CuerpoMente señala que por cada 100 gramos de soya, el cuerpo obtiene el 13 % de las cantidades recomendadas de calcio, por lo que podría prevenir la aparición de enfermedades óseas como la osteoporosis.
- Lácteos: su alto contenido en calcio y vitaminas como el complejo B permite una producción más eficiente de energía y contribuye a la formación y mantenimiento de músculos, dientes y huesos. Alimentos como el yogurt, la leche y el queso son algunos de ellos.
- Yema de huevo: gracias a su dosis de vitamina D, el huevo estimula la absorción y fijación del calcio en huesos y dientes. Esto sin omitir que su proteína es benéfica para los músculos.
- Pescados azules: en los pescados azules es en los que más se encuentra la vitamina D, un nutriente esencial en la síntesis del calcio. “El rey es el arenque, tanto fresco como en conserva. Es el pescado con más vitamina D que existe”, así lo indica el portal Business Insider.
- Frutas y verduras: estos alimentos suelen ser los más importantes en una dieta saludable pues su consumo representa gran parte de los minerales y vitaminas que el cuerpo absorbe. Las espinacas, la col rizada, el brócoli, la manzana, la piña y la naranja son las recomendadas para obtener calcio.