Una alimentación balanceada tiene grandes efectos en la salud física de las personas y es que lo que se come es lo que proporciona al organismo la cantidad necesaria de vitaminas, minerales u otros nutrientes esenciales. No obstante, en ese proceso lo más importante será el consumo equilibrado de productos naturales, bien sean de origen vegetal o animal.

De hecho, la Organización Mundial de la Salud, que es la institución que vigila el desarrollo físico de la población mundial, tiene una perspectiva detallada acerca de la importancia de comer de manera saludable.

Los cereales tienen un alto contenido nutricional, por lo que son recomendables para la dieta. | Foto: Getty Images

“Llevar una dieta sana a lo largo de la vida ayuda a prevenir la malnutrición en todas sus formas, así como diferentes enfermedades no transmisibles y trastornos. Sin embargo, el aumento de la producción de alimentos procesados, la rápida urbanización y el cambio en los estilos de vida han dado lugar a un cambio en los hábitos alimentarios. Actualmente, las personas consumen más alimentos hipercalóricos, grasas, azúcares libres y sal/sodio; por otra parte, muchas personas no comen suficientes frutas, verduras y fibra dietética, como por ejemplo cereales integrales”, menciona la entidad.

Y es que el consumo de los elementos enlistados anteriormente es realmente indispensable, ya que estos son las fuentes más ricas que hay en materia nutricional. Los últimos mencionados, a saber los cereales, poseen una gran cantidad de fibra, así como también cuentan con grandes beneficios en el cuerpo.

“Según recomendaciones de la OMS, el aporte energético de una alimentación equilibrada debe provenir en un 55 % de los hidratos de carbono, nutriente principal de los cereales, en un 30 % de las grasas y el 15 %, de las proteínas”, conforme reseña la Asociación Española de Fabricantes de Cereales.

De hecho, dicha agremiación profundiza en la importancia que tienen los cereales dependiendo de la edad del consumidor, bien sea un niño o un adulto. De esta manera, se muestra cómo el impacto sigue siendo esencial, pero distinto.

La fibra es uno de los nutrientes más presentes en los diferentes tipos de cereales, como la quinoa. | Foto: Getty Images

“En la etapa adulta, los cereales constituyen un gran aliado para equilibrar la alimentación, ya que son una importante fuente de hidratos de carbono, aportan vitaminas y minerales y son muy bajos en grasas”, asevera el sitio web del grupo.

Mientras tanto, agrega que “en niños, los cereales constituyen un alimento imprescindible en la dieta, ya que obtienen con su ingesta un complemento que contribuye a su crecimiento y a sus necesidades energéticas, que les permite desarrollar sus actividades físicas e intelectuales”.

Teniendo en cuenta todo lo anterior, uno de los cereales de mayor beneficio al organismo es la quinoa, que se ha puesto muy de moda en la última década gracias a la tendencia de la vida fit, ya que ha llegado a ser vista como uno de los sustitutos del arroz.

Entre sus principales aportes a la salud está el de ser una poderosa aliada en la prevención o tratamiento de enfermedades degenerativas como el cáncer de colon, la diabetes o los problemas cardíacos.

Por otra parte, EsSalud Perú recoge las declaraciones de la nutricionista del Hospital Voto Bernales, Lisbeth Soria, quien confía en que consumir por lo menos dos veces por semana quinoa mejora el tránsito intestinal y aporta a la erradicación del estreñimiento.

Lo anterior se debe a la alta riqueza fibrosa que tiene.

La quinoa es un alimento con muchos nutrientes. | Foto: Getty Images

Asimismo, la quinoa es un carbohidrato complejo que no causa ningún problema a los pacientes de diabetes, ya que también ayuda a impedir que la glucosa aumente. Por otro lado, ayuda a eliminar grasas del torrente sanguíneo, evadiendo la formación de ateromas, los cuales obstruyen los vasos, las venas y las arterias.

Otras bondades incluyen su propiedad antioxidante, la cual tiene que ver con la prevención de enfermedades, así como los aminoácidos que posee, que ponen su parte para crear proteína y reparar el tejido muscular.