Entre los padecimientos más frecuentes en tiempos como estos se encuentra la diabetes, este padecimiento surge cuando un paciente tiene los niveles de glucosa (azúcar) en la sangre elevados.
La diabetes es catalogada como una enfermedad crónica por la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta se pueda desencadenar por factores genéticos u hereditarios; sin embargo, los pacientes con obesidad, sobre peso o que llevan una vida sedentaria están en mayor riesgo de ser diagnosticados con ella.
Para poder entender en que consiste este padecimiento y darle un debido manejo a la diabetes, la enfermedad se cataloga en dos tipos. La diabetes tipo 1 y la diabetes tipo 2, la primera suele ser la menos diagnosticada y se dan en pacientes de todas las edades, sin embargo, es más común en los niños.
La diabetes tipo 1 impide que el cuerpo produzca insulina o que no cuente con la suficiente cantidad para trasportar el azúcar hacia otras partes del cuerpo, esto gracias a que las células que se encargan de producir insulina, dentro del páncreas, están dañadas, según la biblioteca de salud y medicina de los Estados Unidos, Medlineplus.
Por su parte, la diabetes tipo 2 es la más diagnosticada y surge, por lo general, en pacientes adultos. Cuando se padece de este tipo de diabetes, el cuerpo es resistente a la insulina y no la utiliza con la eficacia que debería. Ante el aumento de las tasas de obesidad y sobrepeso este padecimiento que era usual en pacientes adultos se está haciendo cada vez más frecuente en niños y adolescentes.
Síntomas de la diabetes
- Visión borrosa
- Sed excesiva
- Fatiga
- Orina frecuente
- Hambre
- Pérdida de peso
El portal de salud, belleza y cuidado personal Mejor con Salud menciona que tanto el centeno como la avena son dos de los cereales más consumidos alrededor del mundo. Además, ambos cuentan con propiedades nutricionales esenciales para el buen funcionamiento del cuerpo en general.
Cabe mencionar que la ingesta de centeno no está recomendada para pacientes con intolerancia al gluten, ya que, aunque en menor cantidad que otros cereales, también contiene dicho compuesto. El centeno es empleado para preparar panes y algunas bebidas alcohólicas como la cerveza, algunos tipos de vodka y whiskys.
Gracias a su alto contenido de fibra y su bajo contenido de gluten, el centeno ha marcado un precedente a la hora de reemplazar las harinas refinadas tradicionales. El centeno no se somete a un proceso de refinamiento por esa razón aporta hasta un 30 % de los requerimientos diarios de fibra que requiere el organismo.
Al optimizar el funcionamiento intestinal este es una alternativa relevante para pacientes que padecen de estreñimiento, ya que ayuda a prevenirlo y tratarlo, siempre y cuando se acompañe con la ingesta de otros alimentos saludables y la práctica de actividad física frecuente. Además, regula, los niveles de colesterol y de azúcar en la sangre promoviendo la buena salud de las arterias y las venas.
Entre las vitaminas y nutrientes que contienen el centeno se caracteriza que cuenta con varias de las vitaminas que integran las del grupo B, incluido el ácido fólico. Por ende su consumo frecuente, dentro de un plan de alimentación sano y equilibrado promueve y protege la salud cognitiva.
También ayuda a que el cuerpo asimile nutrientes como el hierro y los aminoácidos, promueve la buena salud cardiovascular manteniendo despejadas las arterias de todas sustancia que quiera taponarlas e impedir la libre circulación de la sangre y el oxígeno hacia otras partes del cuerpo, por ende, mejora la circulación y regula el sistema nervioso. Este producto es ideal para ser integrado en un paciente que desea bajar de peso, ya que genera un efecto de saciedad.