Está comprobado. El ejercicio físico, además de aportar una mejor apariencia estética, puede prevenir algunas enfermedades de salud mental, como la demencia y ciertos tipos de patologías oncológicas. Así lo confirma un estudio realizado recientemente por investigadores médicos de la Universidad de Ottawa, en Canadá, quienes aseguran que realizar actividad física constante puede aportar innumerables beneficios a la salud.

De acuerdo con la investigación, los músculos esqueléticos son capaces de producir al menos 650 sustancias cuando se ejercitan, y estas hacen que funcionen mejor los órganos del cuerpo. En la editorial del estudio, llamado El papel del secretoma en la salud y la enfermedad, se explica el papel real que juega la adaptación del ejercicio regular en la reducción del riesgo de mortalidad y morbilidad en personas que realizan entrenamientos.

Estos hallazgos de los científicos reafirman la recomendación de que las personas deben realizar una mayor actividad física para prevenir y combatir enfermedades como cáncer, diabetes y enfermedades neurodegenerativas. Además, resulta muy beneficioso para retrasar el envejecimiento. Según puntualiza el estudio, los músculos activos ayudan a que la piel sea más saludable y tersa.

El estudio de los científicos canadienses ahondó en las sustancias del sistema inmunológico que se producen debido a la contracción muscular cada vez que se ejercitan los músculos. En términos técnicos, estas sustancias se llaman mioquinas, las cuales conectan los músculos con otros órganos como el cerebro, el hígado, el páncreas, los huesos, los intestinos, la piel, el tejido adiposo y los vasos sanguíneos.

La investigación asegura que los músculos constituyen el órgano endocrino más grande del cuerpo. “Los músculos son el órgano más pesado del cuerpo y representan aproximadamente el 40 % del peso de una persona. Sin embargo, sus funciones bioquímicas son aún más significativas. Producen mioquinas únicas, también producen y liberan sustancias producidas por otros órganos”, detallaron.

Por otra parte, la Universidad de San Pablo (USP), en Brasil, demostró en un estudio que el ejercicio físico podría mejorar la respuesta del organismo a la vacunación contra la covid-19, aún en personas con sus sistemas inmunológicos comprometidos.

Los investigadores brasileños realizaron los análisis en pacientes con enfermedades reumáticas autoinmunes que habían sido vacunadas con la inyección de CoronaVac, de la farmacéutica Sinovac. En consecuencia, tuvieron los siguientes hallazgos: las personas que realizaban ejercicios con frecuencia producían más anticuerpos que los sedentarios.

Uno de los autores del estudio, Hamilton Roschel, coordinador del Grupo de Investigación en Fisiología Aplicada y Nutrición de la Facultad de Educación Física y de la Facultad de Medicina de la USP, explicó que todo funciona mejor cuando las personas adoptan rutinas de ejercicio diaria, aportando beneficios al sistema inmunológico, el sistema cardiovascular, el metabolismo y el cerebro.

Los científicos comprobaron que la contracción muscular y las mioquinas juegan en respuesta el uno al otro y, por tanto, a mayor actividad física, mayor contracción muscular.

Coinciden con los expertos de Canadá en que un estilo de vida sedentario derivará en enfermedad. La producción de mioquinas a través del ejercicio puede capturar la glucosa en sangre y reducirla, como un tratamiento natural contra la diabetes. Estas mismas sustancias logradas con la actividad física responden a la vasodilatación y, por lo tanto, reducen la hipertensión arterial.

José Cesar Rosa Neto, especialista en fisiología de los músculos, del Laboratorio de Inmunometabolismo del Departamento de Biología Celular y Desarrollo del Instituto de Ciencias Biomédicas de USP, apunta un dato importante. Según él, el ejercicio actúa sobre la morfología del cerebro, una acción tan profunda que ayuda a regular la síntesis de proteínas, evitando la hinchazón en el cuerpo.

“Estimulados por el ejercicio, los músculos liberan sustancias con acción antiinflamatoria. En pacientes con covid-19 críticamente enfermos se desencadena la temida tormenta de citocinas, un desequilibrio inflamatorio cuyo resultado puede ser la muerte”, explica Rosa Neto, quien con una metáfora anima a la gente a hacer ejercicios para mejorar la salud: “La carrocería es como un auto nuevo. Puedes tener un modelo increíble, pero se echará a perder si se deja en el garaje“.