Las venas várices o arañitas aparecen en las piernas, pero pueden presentarse también en otras partes del cuerpo. Las venas varicosas (várices) son hinchadas, retorcidas y dilatadas, y se pueden ver bajo la piel. Con frecuencia son de color azul o rojo.

En contexto, las válvulas unidireccionales en las venas de las piernas mantienen el flujo de sangre hacia el corazón.

Por eso, cuando las válvulas no funcionan correctamente, la sangre regresa por la vena y esta se inflama por la sangre que se acumula ahí, lo cual provoca las varices, según el portal dela Biblioteca de Medicina de Estados Unidos Medline Plus.

Por otro lado, la institución Cleveland Clinic señala que normalmente la sangre fluye a través de la vena en dirección hacia el corazón. Las venas varicosas se vuelven una nueva ruta para el flujo de sangre.

James D. Douketis, médico del McMaster University, dice que las mismas pueden estar acompañadas de dolor y causar sensación de cansancio. Además, se desconoce la causa exacta de las várices, aunque es probable que el principal problema sea una debilidad en las paredes de las venas superficiales, que puede ser hereditaria.

Es probable que el principal problema sea una debilidad en las paredes de las venas superficiales, que puede ser hereditaria. | Foto: LionHector/Getty Images

Ejercicios para las várices

Cualquier ejercicio que implique mover la extremidad es aconsejable.

  • Como los ejercicios que promueven la contracción cíclica de la musculatura de los miembros inferiores. Dentro de ellos, Antonio Fernández Brito, médico estético y director de la clínica de flebología Dr. Varices, en Madrid, propone colocarse de puntillas, mover los dedos de los pies, realizar flexiones y rotación de los pies, movimientos de pedaleo, etc.
  • Alejandro Moro, cirujano vascular del Hospital Quirón de la Coruña, también considera bueno caminar, hacer natación y ciclismo. Fernández Brito añade correr.
Otras disciplinas como el yoga o la gimnasia rítmica ayudan a estimular la circulación, movilizando la sangre acumulada de muslos”. | Foto: Getty Images
  • Milagros Oyarzabal Arocena, médico de Familia del Hospital de Alicante señala que “otras disciplinas como el yoga o la gimnasia rítmica ayudan a estimular la circulación, movilizando la sangre acumulada de muslos”.

Remedios naturales para las várices

Aloe vera

Según creencias populares, el siguiente remedio de aloe vera para las varices podría ayudar a mantener hidratada la piel y a combatir la retención de líquidos de una forma completamente natural, según el portal Mejor Con Salud.

Ingredientes:

  • 1/2 litro de agua
  • 2 pencas de aloe vera
  • 1 zanahoria pequeña (12 g)
  • Opcional: miel

Preparación:

  • Pelar y cortar la zanahoria en rodajas.
  • A continuación, lavar y escurrir bien las rodajas.
  • Aparte, poner a hervir el agua en una olla.
  • Proceder a pelar las pencas de aloe vera para extraer su gel.
El siguiente remedio de aloe vera para las varices podría ayudar a mantener hidratada la piel y a combatir la retención de líquidos. | Foto: Getty Images
  • Luego, pasarlas por el chorro de agua para limpiarlo bien de la salvia (la capa amarilla que lo recubre). Reservar en el refrigerador.
  • Una vez que las zanahorias se hayan cocido y estén blandas, apagar el fuego y dejar entibiar un poco el líquido.
  • Verter el gel de aloe vera en la olla.
  • Llevar todo a la licuadora y procesar hasta homogeneizar.
  • Servir y consumir con moderación.
Ajo para reducir las varices
  • Cuenta con propiedades antiinflamatorias, anticoagulantes y vasodilatadoras y ayuda a mejorar la circulación sanguínea.
  • Para aplicarlo hacer una pasta con dos dientes de ajo machacado y una cucharada de aceite de oliva.
  • Cuando ya esté la masa, aplicar en la zona mediante masajes durante un cuarto de hora.
  • Después retirarlo con agua tibia o fría.
Infusión de cola de caballo

Esta planta, famosa por sus propiedades diuréticas, promueve el flujo sanguíneo gracias a su capacidad para disminuir la inflamación y eliminar los líquidos retenidos.

Ingredientes:

  • 2 cucharadas de cola de caballo (20 g)
  • 1 vaso de agua (250 ml)

Preparación:

  • Hervir el agua.
  • Añadir la cola de caballo y dejar reposar durante diez minutos.
  • Colar el contenido del recipiente.
  • Beber dos veces al día para obtener resultados.