La circulación de la sangre es un proceso determinante para el organismo, pues se da cuando el corazón bombea la sangre alrededor del cuerpo y de esta forma las diferentes partes del mismo reciben el oxígeno y otros nutrientes indispensables para funcionar bien.
Sin embargo, hay factores que lo afectan. Por ejemplo, la falta de actividad física, una mala alimentación, poca hidratación, el consumo de alcohol y de tabaco, y enfermedades como la obesidad, la diabetes y la hipertensión.
Los inconvenientes de salud relacionados con la circulación pueden aparecer en cualquier momento de la vida, pero es claro que aumentan con el paso de los años y las piernas son de las partes que más se ven perjudicadas.
El portal Medical News Today indica que algunas de las señales que indican que la persona padece esta afección incluyen punzadas, picazón, entumecimiento, hormigueo, calambres, dolor, calor o frío en el área e hinchazón.
Caminar para mejorar la circulación
Una de las mejores formas de mejorar o activar la circulación en las piernas es con la práctica regular de ejercicio. Hay diferentes formas de hacerlo, pero una de las más prácticas y efectivas es caminar.
Según Modern Heart and Vascular esta práctica es de bajo impacto y es una de las más sencillas y efectivas para poner en marcha la circulación de forma saludable. “Caminar es algo en lo que casi todo el mundo puede participar, y es una de las formas más significativas de mejorar la circulación sanguínea en las piernas de forma natural”, precisa.
La recomendación es empezar poco a poco, dando paseos cortos, incluso de tan solo cinco minutos al día. La mencionada fuente indica que la evidencia advierte que incluso pequeños aumentos en la cantidad de tiempo se camina a diario pueden tener beneficios. Dependiendo de la persona se puede añadir tiempo o velocidad de forma gradual.
Caminar a un ritmo cómodo todos los días aumenta la contracción de los músculos de las piernas y mejora el flujo sanguíneo en las extremidades y en todo el cuerpo, aseguran los expertos.
Otros ejercicios
- Levantar las piernas: acostarse boca arriba y elevar las rodillas flexionadas formando un ángulo de 90º, también ayuda. En este caso se lleva la punta del pie derecho hacia el suelo, manteniendo la otra pierna estable. Se toca el piso y se vuelve a subir. Luego se repite con la otra pierna. Es importante procurar que la espalda no se arquee cuando se baja hasta el suelo y es un ejercicio que se puede repetir en varias oportunidades.
- Emulación de la bicicleta: este es un movimiento que implica elevar y mover las piernas al mismo tiempo, lo que favorece el retorno de la sangre hacia el corazón. Para realizarlo se debe acostar boca arriba y poner las manos detrás de la nuca, elevar las piernas y simular pedalear durante uno o varios minutos. Lo ideal es realizar este ejercicio todos los días, indica una publicación de la revista Mejor con Salud.
Además de estos ejercicios, Medical News Today indica que es importante mantener un peso saludable y para ello la alimentación es determinante. Comer pescado que contiene ácidos grasos omega-3 ayuda a promover la salud cardiovascular y a mejorar la circulación. Lo propio sucede con el consumo de té.
También es importante mantener los niveles de hierro balanceados. Este mineral se requiere para producir hemoglobina, uno de los componentes importantes de los glóbulos rojos que es necesario para transportar el oxígeno.
Referencia:
Cómo mejorar la circulación de las piernas de forma natural