La ingesta de una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, proteínas magras y cereales integrales es clave para cuidar la salud y prevenir el desarrollo de enfermedades. En esa alimentación tampoco debería faltar una porción de frutos secos, que ofrecen una serie de beneficios para el organismo.

Son alimentos que contienen ácidos grasos insaturados y otros nutrientes. Se caracterizan por ser una importante fuente de fibra que ayuda a regular el tránsito intestinal, así como de proteína y otros nutrientes. Lo ideal es consumirlos con moderación y siempre crudos o tostados y sin sal, no fritos, ni cubiertos de chocolate.

En la larga lista de frutos secos se encuentran los pistachos. Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), este alimento es fuente de ácidos grasos monoinsaturados, fibra, calcio, magnesio, zinc, potasio, fósforo, hierro, tiamina, vitamina E y folatos.

Si bien todos los frutos secos son alimentos saludables y nutritivos, el pistacho destaca por ayudar a controlar los niveles de azúcar en la sangre. Según el portal Cuerpo Mente, este alimento es rico en fibra, lo que favorece el tránsito intestinal y controla los picos de glucosa en la sangre.

Información del portal Canal Diabetes indica que estos alimentos ejercerían un papel beneficioso en la diabetes tipo 2. Este sitio web cita una investigación realizada por expertos de la Unidad de Nutrición Humana de la Universidad Rovira y Virgili, de Tarragona, en España, en la cual se determina que, en general, los frutos secos son beneficiosos para el metabolismo de las personas, y en el caso de los pacientes con diabetes, pueden ayudar más, ya que permite que el índice glucémico se mantenga en niveles favorables.

Según el análisis, la composición nutricional de los pistachos es buena para las personas que tienen niveles de glucosa altos, gracias a que son ricos en fibra, betacarotenos y otras sustancias antioxidantes, que también ayudan a mantener el corazón sano y a prevenir patologías cardiovasculares.

En esta línea, el portal de bienestar y salud Tua Saúde indica que este fruto seco contiene importantes cantidades de flavonoides, sustancias antioxidantes que ayudan a regular el funcionamiento de la insulina e influyen positivamente en varias enzimas que equilibran el azúcar en la sangre, siendo importante para prevenir y tratar la diabetes. Además, contienen grasas, fibras y proteínas, favoreciendo el retraso en la digestión de los alimentos, controlando mejor la glucosa.

Contra el colesterol

De otra parte, Cuerpo Mente señala que el pistacho aporta luteína, un carotenoide que evita la oxidación del colesterol y su acumulación en placas de ateroma, así como fitosteroles y fibra que ayuda a eliminarlo de la sangre. “De una a tres raciones diarias (de 30 a 100 gramos) pueden reducir un 11 % el colesterol malo LDL”, precisa.

El pistacho también ayuda a disminuir la presión arterial, según Tua Saúde. Esto se debe a que posee propiedades antiinflamatorias y es rico en minerales, como el potasio, que promueve la eliminación de las sales del organismo. De igual forma, es fuente de magnesio, que mejora la circulación sanguínea, siendo útil para el tratamiento de la hipertensión arterial.

Adicionalmente, este fruto seco tiene un gran contenido en antioxidantes como la vitamina C, la E, el selenio o el resveratrol. Estos nutrientes protegen del daño que causan los radicales libres, tanto a nivel celular como externo. De esta forma, este alimento ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro y mantener la piel sana y bien nutrida.

Gracias a que contienen luteína, riboflavina y zeaxantina, los pistachos también son buenos para mantener una buena salud visual. Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la luteína está relacionada con el betacaroteno y la vitamina A, nutriente favorable para cuidar la salud de los ojos.

Se cree que funciona como un filtro de luz, protegiendo los tejidos oculares del daño de la luz solar. Además de los pistachos, otros alimentos ricos en luteína incluyen yemas de huevo, espinacas, col rizada, maíz, pimiento naranja, kiwi, uvas y calabaza.

Por último, el mencionado fruto seco es rico en hierro, lo que ayudaría prevenir la anemia ferropénica y a fortalecer los huesos. No obstante, los especialistas recomiendan seguir una alimentación variada y consumir también alimentos ricos en vitamina C para mejorar la asimilación de este mineral.