Esto debido a que una serie de mutaciones heredadas pueden ser las causantes directas de que algunos individuos desarrollen la enfermedad. Los autores de la investigación tomaron una muestra de saliva para analizar el ADN de unos 700 pacientes con el tumor en etapa avanzada, y encontraron que el gen BRCA2 era el más común entre varios de ellos. Estos marcadores genéticos permitirán detectar si un paciente está en alto riesgo o no de “tener este tipo de cáncer en su forma más agresiva, de que haga metástasis en otras partes del cuerpo, pero también podría aumentar sus probabilidades de supervivencia”, concluyó Paul Workman, coautor del estudio y jefe del Instituto de Investigación del Cáncer, en el Reino Unido.