Se trata de un trazo en forma de zigzag hallado sobre una concha de molusco. La nueva investigación, publicada en la revista Nature, sugiere que el homo erectus también poseía la habilidad del pensamiento complejo. El descubrimiento demuestra, además, que este homínido explotó recursos como el agua, se rebuscaba la comida y tenía un comportamiento ‘moderno’, algo que hasta el momento solo se le concedía al Homo sapiens.