Cuando el azúcar en la sangre es alta, no suele presentar síntomas contundentes en su etapa inicial. Sin embargo, una cantidad excesiva o insuficiente de glucosa en la sangre podría ser un signo de un problema médico aún más serio.
Si bien la sangre lleva la glucosa a todas las células del cuerpo para ser usada como energía, si las personas sufren de diabetes es importante que mantengan el azúcar en un nivel determinado.
La diabetes es una enfermedad que se caracteriza por niveles elevados de azúcar en la sangre. Con el tiempo, esto puede causar serios problemas. Aunque una persona no tenga esta enfermedad, puede tener problemas de salud si el azúcar en su sangre está muy bajo o muy alto, según el portal especializado en salud MedlinePlus.
De acuerdo a los expertos de la Clínica Mayo, el ejercicio es una parte importante de cualquier plan de tratamiento de la diabetes. Para evitar posibles problemas, se debe controlar el nivel de azúcar en sangre antes, durante y después del ejercicio.
Para obtener los mejores beneficios para la salud, los expertos recomiendan al menos 150 minutos a la semana de actividad física de intensidad moderada, tales como:
- Caminata rápida.
- Andar en bicicleta.
Los expertos también recomiendan que los niños, incluso aquellos con diabetes tipo 1, realicen al menos 60 minutos de actividad moderada a vigorosa todos los días.
Si la persona está tomando insulina u otros medicamentos que pueden causar un nivel bajo de azúcar en la sangre (hipoglucemia), se debe hacer una prueba de azúcar en la sangre de 15 a 30 minutos antes de hacer ejercicio.
Según la Fundación Española del Corazón, reseñado por Saber Vivir, esta sería la mejor forma de hacer ejercicio para controlar la glucosa. De hecho, la diabetes tipo 2 se puede prevenir en un 70 % de los casos con dieta y ejercicio.
- “De 10 a 20 minutos de estiramientos y de fuerza muscular.
- 5 minutos de calentamiento aeróbico (carrera suave).
- De 15 a 60 minutos de ejercicio aeróbico a una intensidad apropiada para la persona.
- De 5 a 10 minutos de ejercicio de baja intensidad al acabar la práctica deportiva”.
Y aunque lo más recomendable es visitar al médico de confianza frecuentemente para conocer su estado real de salud, son muchas las personas que no suelen visitar los centros médicos, pero que aún así tienen sospechas de estar sufriendo de diabetes, por lo que es importante tener presentes los siguientes síntomas, que indican, muchas veces, que está padeciendo de esta enfermedad.
Sed: este es uno de los síntomas silenciosos que puede provocar diabetes tipo 2. “Tiene muchísima sed porque los niveles de azúcar en sangre están tan altos, tan altos, tan altos, que necesita diluir esta glucosa en sangre”, describe el medio especializado en salud Health Talk.
Aumento de la cantidad de orina: ir más de cuatro a siete veces al día al baño, sobre todo si es en la noche cuando se encuentra dormido, puede ser indicio de que los riñones están haciendo un esfuerzo extra por regular los niveles de azúcar en la sangre. “Es la forma que encuentra el cuerpo para eliminar esta glucosa en sangre tan elevada”, dicen los expertos.
Aumento del apetito: el cuerpo le seguirá pidiendo comida así ya se haya alimentado. “Los síntomas más típicos, entre los que se incluyen la polifagia (aumento de apetito), polidipsia (sed excesiva) y poliuria (producción de grandes cantidades de orina), se relacionan tradicionalmente con la diabetes del tipo 1 o autoinmune, que suele afectar a personas jóvenes, y que son muy llamativos”, explicó a Business Insider España el equipo científico de Melio.
Pérdida de peso inexplicable: este síntoma podría verse relacionado con la cantidad de veces que entra una persona al baño y las calorías que pierde y no absorbe.
Fatiga: este puede ser una alerta que el cuerpo da por diferentes patologías. Aunque no sea diabetes, no la debe ignorar. Pero cuando sucede por esta afección, es porque el organismo tiene que trabajar más para eliminar el exceso de azúcar y esto impide que la sustancia pueda entrar y energizar a las células.
Tal y como varios expertos han señalado con anterioridad a Business Insider España, cabe destacar que la fatiga puede ser una alerta silenciosa de tu cuerpo para diferentes patologías. Por ello, independientemente de que sea o no diabetes, no la debes ignorar.