El potasio es el mineral que el cuerpo necesita, según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).
Además, MedlinePlus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, indicó que el potasio también permite que los nutrientes fluyan a las células y a expulsar los desechos de estas, y ayuda a la función de los nervios y a la contracción de los músculos.
Así las cosas, para obtener los beneficios hay que consumir las cantidades requeridas diariamente, y estas dependen de la edad y el sexo, pero en términos generales las recomendaciones de los NIH son:
- Bebes hasta los 6 meses de edad: 400 mg.
- Bebés de 7 a 12 meses: 860 mg.
- Niños de 1 a 3 años: 2.000 mg
- Niños de 4 a 8 años: 2.300 mg.
- Niños de 9 a 13 años: 2.500 mg.
- Niñas de 9 a 13 años: 2.300 mg.
- Adolescentes de 14 a 18 años (niños): 3.000 mg.
- Adolescentes de 14 a 18 años (niñas): 2.300 mg.
- Adultos mayores de 19 años (hombres): 3.400 mg.
- Adultos mayores de 19 años (mujeres): 2.600 mg.
- Adolescentes embarazadas: 2.600 mg.
- Mujeres embarazadas: 2.900 mg.
- Adolescentes en periodo de lactancia: 2.500 mg.
- Mujeres en periodo de lactancia: 2.800 mg.
No obstante, ciertos grupos de personas tienen menos probabilidad que otras de obtener la cantidad suficiente de potasio:
- Las personas con enfermedad intestinal inflamatoria (como enfermedad de Crohn o colitis ulcerativa).
- Las personas que usan ciertos medicamentos (como laxantes o algunos diuréticos).
- Las personas con pica (es decir, que comen cosas que no son alimentos, como arcilla).
Ahora bien, los NIH indicaron que el potasio se encuentra en muchos alimentos, como, por ejemplo:
- Frutas, como albaricoques secos, ciruelas pasas, pasas, jugo de naranja y bananos.
- Verduras, como calabaza de bellota, papas, espinacas, tomates y brócoli.
- Lentejas, frijoles rojos, soya y nueces.
- Carnes, aves y pescado.
Asimismo, el potasio se encuentra en muchos suplementos multivitamínicos/multiminerales y en suplementos que contienen solo potasio, y viene en muchas formas; una forma común es el cloruro de potasio, pero otras formas utilizadas en los suplementos son el citrato de potasio, el fosfato de potasio, el aspartato de potasio, el bicarbonato de potasio y el gluconato de potasio.
“Las investigaciones no han demostrado que alguna forma de potasio sea mejor que las otras. La mayoría de los suplementos dietéticos solo proporcionan pequeñas cantidades de potasio, no más de 99 mg por porción”, puntualizaron los NIH.
¿Qué sucede si no se obtiene suficiente potasio?
De acuerdo con los NIH, obtener muy poco potasio puede aumentar la presión arterial, reducir el calcio en los huesos y aumentar el riesgo de cálculos renales.
“La diarrea o los vómitos prolongados, el abuso de laxantes, el uso de diuréticos, el consumo de arcilla, la sudoración excesiva, la diálisis o el uso de ciertos medicamentos pueden causar una deficiencia grave de potasio. En esta afección, conocida como hipocalemia, las concentraciones de potasio en la sangre son muy bajas”, señalaron los Institutos.
Además, explicó que los síntomas de hipocalemia incluyen estreñimiento, cansancio, debilidad muscular e indisposición.
Asimismo, agregó que la hipocalemia más grave puede causar aumento de la micción, disminución de la función cerebral, altas concentraciones de azúcar en la sangre, parálisis muscular, dificultad para respirar e irregularidad del ritmo cardíaco, y la hipocalemia grave puede ser potencialmente mortal.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.