Es inevitable que las personas se sientan estresadas por lo menos una vez en el día, bien sea porque algo no salió como esperaban, presión laboral, problemas financieros o personales, cambios importantes, sobrecarga de tareas, entre muchas otras razones que pueden influir en el bienestar físico y emocional del individuo.
El estrés es considerado una respuesta natural del cuerpo en situaciones que se perciben como desafiantes o amenazantes, lo que en términos generales provoca ansiedad, tensión y preocupación. Sin embargo, frente a esta frustrante situación, muchas veces los usuarios no saben qué hacer o cómo pueden actuar, puesto que no tienen a la mano las herramientas suficientes para gestionar el estrés.
Meditar es la mejor opción
La meditación es una práctica muy efectiva para aliviar el estrés y promover la relajación tanto a nivel físico como mental. Según indica Mayo Clinic, en un comienzo, el propósito de la meditación es profundizar la comprensión de lo sagrado y las fuerzas míticas en la vida; pero en la actualidad, se ha convertido en una herramienta para producir un estado de relajamiento profundo y una mente tranquila.
Asimismo, la fuente cita que, durante la meditación, la persona concentra su atención y elimina el flujo de pensamientos confusos que pueden estar saturando la mente, causando así un estado de estrés.
Cómo utilizar la meditación para gestionar el estrés
Es un procedimiento que requiere seguir una serie de indicaciones para que sea efectivo, a continuación, le brindamos una guía básica.
- En primera instancia, encuentre un lugar tranquilo y sin distracciones donde pueda sentarse cómodamente; si lo prefiere, puede meditar acostado.
- Escoja una silla, un cojín, una alfombra o colchoneta para que se pueda sentir mucho más a gusto.
- Aquí debe adoptar una postura cómoda que le permita mantener la columna vertebral recta. Si escogió hacerlo desde una silla, deje los pies planos en el suelo, cruce las piernas en posición de loto, o acuéstese boca arriba.
- Ahora, cierre los ojos y comience a enfocarse en la respiración. Hágalo con respiraciones profundas y lentas, inhalando por la nariz y exhalando por la boca.
- Preste atención a sus pensamientos sin necesidad de juzgarlos. Solo permítase sentir para que ellos vengan y se vayan con calma.
- Para mayor precisión en la técnica, imagine un sitio tranquilo, ya sea una playa, un bosque o algo que le genere paz para sentir la relajación que le brinda dicho entorno.
- Puede utilizar una grabación de meditación guiada para seguir instrucciones más efectivas.
- Finalmente, no olvide hacerlo de manera regular, incluir esté hábito dentro de su rutina puede ayudarle a gestionar no solo el estrés, sino otras emociones negativas.
Beneficios de la meditación
La meditación puede proporcionar un equilibrio que beneficia su bienestar emocional y la salud general. Además, es ideal para saber cómo enfrentar el día a día de una forma más controlada e inteligente.
- Aumenta la autoconciencia.
- Mejora la calidad del sueño.
- Permite enfocarse en el presente.
- Genera habilidades para controlar el estrés.
- Reduce las emociones negativas.
- Reduce la presión arterial.
- Disminuye la frecuencia cardiaca.
- Aumenta la creatividad.
Para concluir, la meditación resulta muy útil para tratar con afecciones médicas que ya han sido diagnosticadas por profesionales. Mayo Clinic, resalta que ayuda a controlar los síntomas de las siguientes afecciones:
- Ansiedad
- Asma
- Cáncer
- Dolor crónico
- Depresión
- Enfermedad cardíaca.
- Hipertensión arterial
- Síndrome de colon irritable
- Problemas de sueño
- Cefaleas tensionales
De igual forma, es importante que consulte con un profesional de la salud sobre su condición médica, y cuáles son las ventajas que tiene la meditación de acuerdo con el diagnóstico que este le dé.