El bicarbonato de sodio es un antiácido que tradicionalmente se ha usado para aliviar problemas estomacales y de indigestión. Sin embargo, se ha convertido en un producto al cual se le han multiplicado sus usos, entre ellos los relacionados con tratamientos de belleza.
Al ser una sustancia a la que se le atribuyen propiedades antibacterianas, se considera una buena alternativa para la limpieza de la piel, pues además de ayudarle a recobrar su lozanía, puede servir para eliminar el acné y eliminar manchas, por ejemplo. No obstante, es importante no abusar de las cantidades, ni el tiempo que se deje expuesto sobre el rostro, pues también es posible que genere resequedad.
En lo que tiene que ver con las manchas, el portal de estilo de vida unCOMO indica que gracias a sus bondades, el bicarbonato de sodio ayudaría a conseguir un tono más unificado y luminoso, y para ello se puede elaborar una mascarilla que no debe usarse más de una vez a la semana debido a sus efectos abrasivos.
Una publicación de la revista Vogue de México sugiere la siguiente preparación de un producto para atenuar las manchas.
Ingredientes:
- Dos cucharadas de bicarbonato de sodio
- Dos limones
- Una cucharada de miel
Preparación:
Se mezclan los ingredientes hasta formar una pasta y se aplica con el rostro limpio, evitando entrar en contacto con zonas sensibles como los ojos y la boca. Se deja actuar durante unos 15 minutos y luego se enjuaga con suficiente agua. Posteriormente, se aplica una crema hidratante.
Cada uno de estos ingredientes tiene propiedades antibacterianas, exfoliantes y restauradoras, lo que te ayudará a la piel mejorar su condición si se aplica al menos una vez por semana, precisa Vogue. La recomendación es hacer uso de esta mascarilla en la noche, ya que el concentrado de la vitamina C que tiene el limón puede manchar la piel si entra en contacto con el sol.
Otros beneficios del bicarbonato para la piel
Se dice que sus micro partículas y propiedades alcalinas permiten restaurar el pH de la piel, lo que lleva a que la dermis se sienta más suave.
Al bicarbonato de sodio se le atribuyen propiedades antiinflamatorias y antisépticas, lo que lo convierte en un ingrediente ideal para elaborar diversos tratamientos farmacológicos para aliviar molestias como irritación de la piel, picaduras de insectos y sarpullidos leves, de acuerdo con una publicación de la revista Mejor con Salud.
Se dice que tiene un poder alcalanizador y es precisamente esta propiedad la que ayuda a controlar la grasa de la piel, ya que equilibra los niveles de pH en la dermis, evitando que se produzcan más aceites de lo normal, se tapen los poros y surjan los indeseables granitos o espinillas.
El bicarbonato también tiene un efecto limpiador ya que funciona como un antiséptico que evita que los brotes o pequeñas heridas se infecten, además de ayudar a disminuir la inflamación de la piel.
Como exfoliante
Otra de sus bondades es que puede ser usado como exfoliante para eliminar las células muertas de la piel. Se puede formar una pasta con un pequeña cantidad de polvo y agua tibia, masajear suavemente la piel y enjuagar. Para evitar que el rostro se reseque, se debe aplicar una crema hidratante de manera inmediata y evitar repetir este procedimiento con frecuencia.
Es importante tener claro que los especialistas no recomiendan su uso solo debido a que se trata de una sustancia demasiado alcalina que puede producir una pérdida de humedad significativa en la piel, ocasionando irritación, resequedad, arrugas, descamación, entre otras molestias.
Por ello, aunque se puedan elaborar exfoliantes y mascarillas caseras, lo aconsejable es siempre consultar primero con el dermatólogo para validar su uso de acuerdo con el tipo de piel y las necesidades puntuales de cada persona.