Las avellanas tiene diversos beneficios para la salud, ayudando a disminuir el colesterol malo, prevenir la anemia, cuidar de la salud ósea y favorecer el metabolismo del hígado, por ser ricas en antioxidantes y nutrientes como hierro, fósforo, ácido fólico, calcio, magnesio y vitaminas del complejo B.

En concreto, por ser ricas en grasas buenas y fibras, las avellanas ayudan a disminuir el colesterol malo LDL, los triglicéridos y aumentar el colesterol bueno HDL. Asimismo, gracias a su contenido de vitamina E, un potente antioxidante, favorece la disminución de la inflamación en el organismo, disminuyendo el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, según el portal Tua Saúde.

Cabe destacar que tiene una gran presencia de vitamina E, así como en fitonutrientes: fitoesteroles (especialmente betasitosterol) y protoantocianidinas. Una ración de 30 gramos de avellanas proporciona el 67 % de la vitamina E que se precisa al día, según el portal de salud Cuerpo y Mente.

Además, varios nutrientes presentes en la avellana contribuyen a mantener la salud cardiovascular. Por ejemplo, las proteínas, de muy buena calidad, contienen una elevada proporción de arginina, un aminoácido que contribuye al buen funcionamiento del sistema cardiovascular.

Gracias a su contenido de vitamina E, un potente antioxidante, favorece la disminución de la inflamación en el organismo, | Foto: Ralwel

Crema de avellana

Ingredientes:

  • 250 g de avellanas.
  • 20 g de cacao en polvo.
  • 2 cucharadas de sopa colmadas de azúcar de coco.

Preparación:

  • Precalentar el horno a 180 °C. Colocar las avellanas en una bandeja y llevarlas al horno, dejándolas tostar durante 10 minutos o hasta que estén doradas.
  • A continuación, agregar las avellanas tostadas en un procesador de alimentos o licuadora y batirlas hasta que obtengan una consistencia cremosa.
  • Una vez obtenida la consistencia se debe agregar el cacao en polvo y el azúcar de coco, licuando nuevamente la mezcla. Colocar la crema en un recipiente de vidrio y está listo para untarla.

Otros beneficios de las avellanas

Fortalecer el cerebro y la memoria

  • Las avellanas son ricas en ácido fólico, magnesio y zinc. Estos micronutrientes son necesarios para la transmisión de impulsos nerviosos y aumentan la capacidad de memoria y aprendizaje, lo que es beneficioso para los niños en edad escolar, así como para los ancianos que poseen fallas en la memoria.
Las avellanas son ricas en ácido fólico, magnesio, zinc, los cuales son micronutrientes que son necesarios para la transmisión de impulsos nerviosos, aumentando la capacidad de memoria | Foto: Getty Images / Mohammed Haneefa Nizamudeen

Salud del corazón

  • Gracias a su aporte de magnesio, ácido fólico y de potasio, las avellanas también podrían ayudar a controlar la presión arterial, debido a que ayudan a mantener la salud de los vasos sanguíneos.

Arterias

  • La densidad de grasas buenas de las avellanas es esencial para controlar los niveles de lípidos en sangre y prevenir problemas como la arterosclerosis, según el magacín Mundo Deportivo, en su sección de salud y bienestar.
El consumo de avellanas ayuda a reducir y controlar el azúcar en la sangre, aumentando la sensibilidad a la insulina. | Foto: Getty Images

Controlar el azúcar en la sangre

  • Debido a su contenido de fibras y a los nutrientes que posee, como el ácido oleico y el magnesio, el consumo de avellanas ayuda a reducir y controlar el azúcar en la sangre, aumentando la sensibilidad a la insulina.

Prevenir el cáncer

  • Las avellanas contienen una elevada concentración de antioxidantes, vitaminas y minerales que pueden ofrecer algunas propiedades anticancerígenas. Estos frutos secos poseen un antioxidante conocido como proantocianidinas, los cuales protegen contra el estrés oxidativo.
  • Además de esto, su contenido de vitamina E y de manganeso protegen contra el daño de las células que podrían causan cáncer, disminuyendo así su riesgo.

Controlar o disminuir el peso

  • Las avellanas son un fruto seco que aportan una buena cantidad de fibra. Esto hace que se genere mayor sensación de saciedad, por lo que consumirlas en pequeñas cantidades en las meriendas o en las ensaladas, por ejemplo, podrían favorecer la pérdida de peso.