El funcionamiento del área digestiva del cuerpo humano, es uno de los elementos más claves a tener en cuenta si se refiere al bienestar del organismo. A partir de estos componentes, el cuerpo humano digiere ciertos alimentos, y es capaz de absorber distintas vitaminas, minerales y propiedades, que nutren y fortalecen el cuerpo humano.
En caso de que estas posean un funcionamiento o desarrollo deficiente, el individuo puede empezar a sufrir distintos daños puntuales, como por ejemplo, cólicos, mareos, estreñimiento o dolor e inflamación abdominal, entre muchas otras molestias, las cuales pueden imposibilitar o dificultar la vida cotidiana.
Este tipo de daños pueden ser bastante amplios, llegando a producir problemas hasta para realizar ciertos movimientos en el día a día.
Un mal funcionamiento del área digestiva, se puede producir a causa de distintos daños puntuales y globales, como lo puede ser por ejemplo, el consumo de un alimento en mal estado, o ciertos hábitos alimenticios que degeneren al cuerpo humano, y sus distintos componentes.
A partir de esto, en caso de que se sufran los daños mencionados, es clave interrumpir los hábitos nocivos que han desencadenado estas afectaciones, y en su defecto, adquirir otros que puedan dar paso a un mejor desarrollo general de estas labores.
Entre los elementos más comunes al hablar de las recomendaciones para el cuerpo humano y sus funciones, suelen destacar las frutas, las verduras y las hierbas, gracias a que estas suelen contar con cantidades grandes de distintos nutrientes claves para el bienestar de cada persona.
Es por esto, que la gran mayoría de estos ingredientes, son utilizados para la realización de jugos, tés, infusiones u otras bebidas de gran beneficio para el organismo.
Uno de estas preparaciones resaltadas, con gran utilidad para combatir las dificultades digestivas, es el jugo de sandía y pepino, dos ingredientes altamente reconocidos por sus efectos, de forma general.
En primer lugar, según explica el portal, Mejor Con Salud, los beneficios a partir de este consumo, se deben a que ambos elementos poseen una gran cantidad de agua en su composición, además de poseer una cantidad baja de calorías, por lo que suele estimular la expulsión de algunos desechos que en caso de acumularse suelen ocasionar los daños previamente mencionados.
En el caso puntual de la sandía, además de poseer cantidades grandes de agua en su aporte, posee una gran cantidad de cualidades, las cuales estimulan las funciones metabólicas de órganos como el colon o los riñones.
De la misma forma, es destacable su aporte en fibra, lo que da paso a que el tránsito intestinal pueda verse normalizado adecuadamente.
El pepino, de manera concreta, posee ciertas similitudes a la sandía, permitiendo disminuir la inflamación abdominal, así como también evitar algunos daños celulares relacionados con la oxidación en el cuerpo humano.
A estos dos ingredientes, se les puede unir la participación de otros elementos para realizar este jugo, como por ejemplo, el apio y el limón. Estos funcionan de manera natural como dos laxantes altamente recomendados para el cuerpo humano, además de aportar propiedades diuréticas, las cuales disminuyen los trastornos alimenticios.
¿Cómo prepararlo?
Para la realización de esta receta, se recomienda contar con media sandía, un manojo de apio, un pepino, un limón, además de un litro y medio de agua.
En primer lugar, se debe retirar las semillas de la sandía, para así poder cortarla; luego se pelará y se cortará el pepino, para lavarlo junto al apio. Posteriormente se deben unir estos tres ingredientes junto al agua en una jarra para poder licuarlos.
Una vez se obtenga una mezcla homogénea, se pueden añadir las rodajas de limón, para así dejar reposando esta preparación en la nevera, con el fin de consumirla a temperatura fría, finalmente.