Con el paso de los años, es común que el cuerpo de las personas comience a experimentar distintos cambios, que en ocasiones pueden generar molestia, incomodidad o dolor, pero que hacen parte del ciclo de la vida, lo que, por supuesto, no significa que no puedan evitarse en lo posible o reducir sus efectos para que no afecten de manera considerable la calidad de vida de quien los padece.
Por esa razón, aunque dichos cambios parezcan completamente normales, deben tener la atención adecuada y tratarse la mejor manera, puesto que pueden estar indicando problemas mayores u ocasionar otros, tal como las varices que suelen aparecer en la zona de las piernas, siendo bastante notorias y según la gravedad del caso, dolorosas.
Si bien estas son famosas debido a la afectación estética que provocan, principalmente en las mujeres, que son a quienes se les ha dado una gran carga al rededor de la belleza históricamente, lo cierto es que el problema que estas pueden llegar a ocasionar va mucho más allá de la belleza física y por ello muchas personas optan por buscar algunos remedios que ayuden a eliminarlas o reducirlas lo mejor posible.
Lo primero que debe saberse para así lograr reducirlas de manera correcta, es saber que la insuficiencia venosa crónica, como se le conoce médicamente, es el resultado directo de la perdida de capacidad en las válvulas que impulsan a la sangre para que retorne al corazón, lo cual termina por dilatar las venas y ensancharlas debido a la acumulación de sangre, en especial si se mantiene demasiado tiempo de pie.
Aunque puede que estas se den de forma hereditaria, también puede deberse a cambios hormonales o incluso el embarazo, pero puede que en esta última causa las varices desaparezcan una vez termine el periodo del embarazo o simplemente se reduzcan.
Vinagre de manzana
El poder del vinagre de manzana va mucho más allá de la cocina, puesto que este contribuye significativamente a eliminar es las varices gruesas, dado que mejorara la circulación de la sangre, reduciendo la presencia de incómodas varices en la piel.
La forma de utilización varía de las condiciones en las que se encuentren dichas venas, y qué tan distribuidas estén en toda la zona de las piernas, tal como se explica a continuación:
- Si estas se encuentran en algunos puntos específicos, lo mejor es que con la ayuda de dos o tres compresas sumergidas en vinagre, colocándolas sobre las partes afectadas por al menos quince minutos antes de retirarlas y masajear suavemente, repitiendo el proceso dos veces al día puede ser en la mañana y en la noche.
- En llegado caso que estas estén distribuidas por distintas partes de la pierna, lo mejor es optar por llenar un balde con el líquido diluido en agua tibia para poder rellenarlo y queden todas completamente cubiertas, para masajearlas mientras se encuentran sumergidas.
Cinco ejercicios que ayudan a tratar las venas várices
El portal especializado Mejor con Salud listó una serie de ejercicios que pueden ayudar a tratar la vena várice y son los siguientes:
- Separación de piernas: consiste en separar y juntar las piernas, en repetidas ocasiones, tratando de mantener un equilibrio para que no caigan hacia el suelo. Para realizarlo se acuesta en el suelo mirando hacia el techo, se levantan las piernas estiradas, se separan y se vuelven a juntar. Se practican dos o tres series de 15 repeticiones cada una.
- Flexiones talón-punta: para hacerlo basta con sentarse en una silla y separar un poco los pies. En esa posición hay que levantar la punta de los pies y después, levantar los talones. Si se realiza alrededor de 20 veces, ayudará a estimular la circulación.
- Pedaleo: consiste en simular el movimiento que se realiza mientras se monta una bicicleta, es decir, hacer un pedaleo en el aire. Para hacerlo, es necesario recostarse en el suelo y con las piernas elevadas ir flexionando las rodillas de manera intercalada.
- Giros: para realizarlo hay que acostarse boca arriba en una estera o una colchoneta. Después se levanta una de las piernas, estirándola completamente. Con la pierna arriba, se deben hacer movimientos circulares en sentido de las manecillas del reloj. Lo ideal es hacer 20 giros con cada pierna.
- Caminar, correr o hacer natación: estos ejercicios aminoran los síntomas de las varices, pues estimulan la circulación sanguínea al ejercer presión sobre algunos músculos del cuerpo.