Recientemente expertos integrantes del Comité de Vacunas y Biológicos de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica (SLIPE) se reunieron para analizar la situación en la región frente a la amenaza de poliomielitis, y concluyeron que el riesgo de reintroducción de esta patología es real.

El Dr. Roberto Debbag, presidente de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica (SLIPE), explica que esta situación es consecuencia de diversos factores como las bajas y heterogéneas coberturas de vacunación, las corrientes migratorias regionales impulsadas, por ejemplo, por los conflictos bélicos en otros países, entre otros.

De acuerdo con organismos internacionales, el 25 % de los niños de América Latina y el Caribe están en riesgo de contraer enfermedades infecciosas graves y prevenibles a través de la vacunación, pues no han completado su esquema de vacunación.

La poliomielitis es una enfermedad infecciosa causada por el poliovirus, que puede provocar parálisis irreversible y, en algunos casos, la muerte de niños menores de cinco años.

A fin de contrarrestar la situación, los expertos de SLIPE brindan las siguientes recomendaciones:

  • Emitir una alerta epidemiológica en tiempo real frente al riesgo de reintroducción del poliovirus.
  • Garantizar una adecuada vigilancia epidemiológica, incluyendo diagnóstico molecular, que sea oportuna y en tiempo real, para detectar casos importados y contribuir a prevenir la diseminación del virus y los consecuentes brotes epidémicos.
  • Implementar el esquema de vacunación recomendado para la prevención de la poliomielitis en América Latina: tres dosis de IPV más un refuerzo de vacuna poliomielítica inactivada (al segundo año de vida o de cuatro a seis años).
Según los expertos, es necesario que se refuerce la puesta al día de los esquemas de vacunación atrasados de los niños y niñas de Latinoamérica. | Foto: Getty Images
  • Evitar el uso de vacunas orales (OPV y bOPV) contra la polio en América Latina y el Caribe debido a que la circulación silenciosa de poliovirus derivado de la vacuna oral atenuada es la causante de la mayoría de los brotes de los últimos años.
  • Evitar el uso de vacunas fraccionadas ante al riesgo de reintroducción del poliovirus.
  • Considerar el uso de vacunas combinadas como una de las posibles estrategias para lograr la recuperación de las coberturas de vacunación en los países de la región.
  • Mantener las coberturas de vacunación superior al 95 % y garantizar su homogeneidad en los países de la región.

Por otra parte, el Dr. Roberto Debbag indica que, por años, la erradicación de la polio a escala global ha sido un esfuerzo colectivo a nivel mundial; sin embargo, ahora más que nunca es una amenaza de salud pública que requiere poner en marcha planes de acción a nivel local y regional que refuercen la puesta al día de los esquemas de vacunación atrasados de los niños y niñas de Latinoamérica, así como el llamado a la población para que acudan a las instalaciones de salud más cercanas.

“No queda duda de que las vacunas son seguras y eficaces; además, son la base de todo sistema sólido de atención primaria en salud. Hoy más que nunca, debemos comunicar los beneficios de la vacunación en la región y evitar así que enfermedades que estaban prácticamente erradicadas, como la polio, resurjan”, finaliza el presidente de SLIPE.

De acuerdo con la Clínica Mayo, aunque la poliomielitis puede provocar parálisis y la muerte, la gran mayoría de personas infectadas con este virus no se enferma ni se entera de que se infectó.