El nutriente más importante para la salud de los huesos es el calcio, uno de los minerales más abundante que se encuentra en el cuerpo humano. Este se halla en los dientes y los huesos, además de los tejidos corporales, las neuronas, la sangre y otros líquidos del cuerpo. De acuerdo con Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el calcio ayuda a formar y mantener los dientes y los huesos sanos, así como prevenir enfermedades como la osteoporosis.
Además, este nutriente le ayuda al organismo a mejorar la coagulación de la sangre, enviar y recibir las señales nerviosas, generar la contracción y relajación muscular, secretar de hormonas y otros químicos, y mantener de un ritmo cardíaco normal. Aunque el calcio lo segrega el organismo de forma natural, este también se puede obtener por medio de algunos alimentos ricos en este compuesto. Entre los alimentos ricos en calcio están productos lácteos como la leche, el queso, el yogur, entre otros.
Por otra parte, el portal web Tua Saúde destaca las propiedades de los higos, pues es una de las frutas más ricas en calcio, potasio y vitaminas del complejo. Del mismo modo, se destaca por sus propiedades “antioxidantes, antiinflamatorias, antibacterianas, antiulcerosas, hipoglucémicas, hipolipemiantes, laxativas, hipotensoras, antihipertensivas, antiespasmódicas y anticancerígenas, por lo que si se incluye en una alimentación saludable y equilibrada puede aportar diversos beneficios para la salud”.
Entre sus principales beneficios, esta fruta, al tener altas cantidades de calcio, magnesio y fósforo, ayudan a cuidar la salud de los huesos y de los dientes, siendo una excelente opción para prevenir o mejorar la osteopenia y la osteoporosis. Asimismo, su contenido de fibra ayuda a reducir la absorción de las grasas de los alimentos del intestino, disminuyendo los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre y evitando complicaciones, como aterosclerosis, derrame e infarto.
¿Cómo consumir el higo?
De acuerdo con el portal en mención, el higo se puede consumir fresco, seco o deshidratado e incluso enlatado, ya sea solo o en otras preparaciones como compotas o ensaladas. No obstante, los expertos aconsejan elegir una fruta fresca y con cáscara, ya que es baja en calorías y azúcares en comparación con su presentación deshidratada o enlatada.
“La porción recomendada de higos frescos en una dieta equilibrada es de 2 unidades medianas o 1 unidad deshidratados al día”, indica Tua Saúde.
Por otra parte, este alimento también se puede consumir en forma de infusión por medios de sus hojas y para ello, tan solo de se debe colocar tres hojas medianas sin tallo y cortadas en pedacitos en 200 ml de agua, calentar a fuego bajo durante 5 a 10 minutos y luego retirar del fuego para su posterior consumo.
Otros beneficios del higo
- Previene el envejecimiento prematuro: gracias a sus antioxidantes, como las antocianinas, quercetina y limoneno, el higo previene el envejecimiento precoz, debido a que combate los radicales libres. Como tal, estos son los causantes del daño en las células de la piel, los cual ayuda a prevenir la flacidez y la formación de arrugas.
- Fortalece el sistema inmunológico: el higo se caracteriza por su contenido de flavonoides, carotenoides y quercetina, que son compuestos antioxidantes que ayudan a fortalecer las células del sistema inmune contra infecciones. Esto ayuda a prevención afecciones como la gripe, resfriado y rinitis alérgica.
- Previene el riesgo de cáncer: al ser un fruto rico en antioxidantes, “el higo ayuda a combatir el exceso de radicales libres y fortalecer el sistema inmunológico, previniendo el riesgo de que surjan algunos tipos de cáncer, como el de colon, ovario y mama”.