El colesterol es una sustancia cerosa que se encuentra en la sangre y se trasporta adherido a las proteínas, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Además, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explicó que el cuerpo necesita algo de colesterol para producir hormonas, vitamina D y sustancias que le ayuden a digerir los alimentos.
Asimismo, existen diferentes tipos de colesterol, que dependen de qué trasporta la lipoproteína y ellos son:
- Lipoproteína de baja densidad (LDL). El colesterol LDL, o “malo”, trasporta las partículas de colesterol por todo el cuerpo. El colesterol LDL se acumula en las paredes de las arterias, lo que genera su endurecimiento y estrechamiento.
- Lipoproteínas de alta densidad (HDL). El colesterol HDL, o “bueno”, recoge el exceso de colesterol y lo lleva de nuevo al hígado.
Adicional, la causa más común del colesterol alto es un estilo de vida poco saludable y esto puede incluir:
- Hábitos alimenticios poco saludables, como comer muchas grasas dañinas. Un tipo, la grasa saturada, se encuentra en algunas carnes, productos lácteos, chocolate, productos horneados y alimentos procesados y fritos. Otro tipo, la grasa trans, se encuentra en algunos alimentos fritos y procesados. Comer estas grasas puede elevar su colesterol malo (LDL).
- Falta de actividad física, con mucho sedentarismo y poco ejercicio. Esto reduce el colesterol bueno (HDL).
- Fumar, lo que reduce el colesterol bueno (HDL), especialmente en las mujeres. También aumenta su colesterol malo (LDL).
Por ello, para bajar el colesterol se pueden realizar cambios en el estilo de vida y el portal CuerpoMente reveló que las avellanas son ideales por ser ricas en grasas buenas y fibras.
Sobre la misma línea, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar ‘Tua Saúde’ reveló que “gracias a su contenido de vitamina E, un potente antioxidante, favorece la disminución de la inflamación en el organismo, disminuyendo el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares”.
Además de esto, “gracias a su aporte de magnesio, ácido fólico y de potasio, las avellanas también podrían ayudar a controlar la presión arterial, debido a que ayudan a mantener la salud de los vasos sanguíneos”.
Información nutricional por 100 gramos de avellanas
- Calorías: 689 kcal
- Lípidos: 66,3 g
- Carbohidratos: 6 g
- Fibra: 6,1 g
- Vitamina E: 25 mg
- Vitamina B3: 5,2 mg
- Vitamina B6: 0,59 mg
- Vitamina B1: 0,3 mg
- Vitamina B2: 0,16 mg
- Ácido fólico: 73 mcg
- Potasio: 730 mg
- Calcio: 250 mg
- Fósforo: 270 mg
- Magnesio: 160 mg
- Hierro: 3 mg
- Zinc: 2 mg
De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Por su parte, otros hábitos para tener buenos niveles de colesterol son:
1. Hacer ejercicio: lo ideal es seguir las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que aconseja por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.
2. Dejar de fumar: el tabaquismo es una causa principal de enfermedad cardiovascular (ECV) y provoca una de cada cuatro muertes debidas a esta enfermedad.
3. Si se bebe alcohol, hacerlo con moderación y para los adultos sanos, esto significa hasta una copa por día para las mujeres de todas las edades y para los hombres mayores de 65 años, y hasta dos copas por día para los hombres menores de 65 años.