Una de las enfermedades que denota la llegada del envejecimiento es la demencia, una afección presente, por lo general, desde los 65 años; sin embargo, puede aparecer más ‘prematuramente’. Hace algunos meses se conoció el caso de un joven en China, quien, solamente con 19 años, fue diagnosticado con alzhéimer.
El dictamen puso la alerta en la comunidad científica, ante el riesgo de que las deficiencias neurodegenerativas sean más constantes en la población joven. La confirmación de que el alzhéimer no afecta exclusivamente a los adultos mayores quedó compilada en un estudio difundido por la revista Journal of Alzheimer’s Disease.
Según informó El Mundo, los primeros síntomas se manifestaron en el adolescente a los 17 años, pero con el paso de los meses el panorama empeoró cuando comenzó a olvidar episodios del corto plazo. Los signos fueron progresivamente más notorios una vez que se le dificultaba leer y tenía, además, reacciones ‘lentas’.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que, a nivel mundial, a más de 55 millones de personas se les ha detectado demencia, la mayoría de las cuales habita en territorios de medios y bajos ingresos. En cuanto al alzhéimer, este representa entre el 60 y 70 % de los casos.
Superalimento que favorece al cerebro
Prácticas adoptadas y otras omitidas hacen la diferencia en la salud cerebral; por ejemplo, una alimentación equilibrada en la que no falten los nutrientes necesarios. La actividad física también tiene su rol para potenciar la función cognitiva y, en ese sentido, la atención y memoria.
“Durante largos años se ha conocido que el ejercicio tiene efectos positivos sobre el cerebro y la salud mental. No solo se dan a nivel preventivo, sino también en las personas que presentan problemas mentales”, dijo Andrea Solera Herrera, de la Escuela de Educación Física y Deportes en la Universidad de Costa Rica.
El portal Información subraya las ventajas de consumir arándanos para mejorar el estado del cerebro, gracias a sus antioxidantes y aporte para disminuir el riesgo del alzhéimer y la presencia de otras demencias. De acuerdo con ese sitio web, su ingesta podría establecer una ‘barrera’ frente a los radicales libres.
En este punto cabe destacar su función en mejorar la memoria y concentración. Por otro lado, Business Insider hace mención a un estudio de la Universidad de Cincinnati (Estados Unidos) que asoció los arándanos con un menor deterioro cognitivo. El análisis tuvo una muestra ‘pequeña’, pero con acercamientos.
Este incluyó a 33 personas reclutadas y encontró resultados positivos entre quienes comieron la fruta por cuatro semanas. En general, los participantes, previo al monitoreo, habían expresado tener los síntomas iniciales de un deterioro cognitivo y sobrepeso.
No olvidar la actividad física
Regresando al potencial de la actividad física sobre el cuerpo, particularmente de uno de los órganos más importantes, Solera explicó que “se liberan endorfinas durante el ejercicio, que tienen efectos positivos inclusive hasta horas posteriores”.
En el sitio web de la Universidad de Costa Rica quedó consignado que, según Solera, “se producen efectos a nivel celular y molecular del sistema nervioso central, permitiendo que haya comunicaciones más eficientes y rápidas entre diferentes áreas cerebrales”.
Por otra parte, la Organización Mundial de la Salud afirma que hoy en día la demencia es considerada como “la séptima causa de defunción y una de las causas principales de discapacidad y dependencia entre las personas de edad en el mundo entero”. Adicionalmente, el organismo enfatizó en que puede afectar “desproporcionadamente (aunque no solo) a las mujeres, tanto directa como indirectamente”.