Bajar de peso es el sueño de muchas personas para tener una mejor figura y también cuidar su salud. Para alcanzar este objetivo recurren a dietas saludables y ejercicio, pero hay algunos alimentos que ayudan a perder esos kilos de más.
El superalimento que recomiendan en el portal Las Provincias es la moringa oleifera, la cual es muy conocida por sus fines terapéuticos y medicinales, pero esta tiene fibra y proteínas que ayudan a mantener la sensación de saciedad para no caer en la tentación de estar ‘picando’ comidas, principalmente alimentos ricos en calorías.
De acuerdo con estudios realizados por University of Ottowa, la moringa se utiliza para reducir los niveles de colesterol y ayuda a adelgazar por sus propiedades para acelerar el metabolismo y en ocasiones disminuye el apetito.
Otro de los beneficios de esta planta está en tratar algunos problemas gastrointestinales, pues sirve para regular el funcionamiento del intestino.
Los aminoácidos y proteínas que contiene la moringa son los que ayudan a actuar directamente como estimulante del metabolismo ayuda a quemar grasa.
“La moringa para adelgazar se bebe y se prepara como té; consiste en hervir la hierba para después consumirla caliente o fría (dependiendo el gusto)”, señala el portal Salud 180. Además, en el mencionado sitio web aconsejan tomar esta infusión en la mañana o en las tardes, pues en la noche puede causar problemas para dormir.
En Salud 180 también aconsejan no exceder el consumo de moringa, además advierten que esta no es la fórmula mágica para adelgazar, pues para lograr este propósito hay que llevar una dieta saludable y practicar regularmente actividad física.
Según el portal especializado Ya Salud, las semillas de la moringa contribuyen a bajar de peso, pues funcionan como depurativo natural, regulan el tránsito intestinal, provocan sensación de saciedad, ayudan al organismo en la conversión de grasas en energía, aceleran el metabolismo y son bajas en calorías.
Una de las formas de consumirlas para bajar algunos kilos es pelar las semillas hasta dejar su centro blanco al descubierto, luego es posible consumirla como cápsulas o en la comida como guisantes.
Así mismo, una de las maneras más tradicionales de consumir la moringa es en té. Para ello, se pone una taza de agua al fuego y cuando esté a punto de ebullición se añaden tres cucharaditas de hojas secas, se retira del fuego, se deja reposar durante cinco minutos. Luego se cuela y se endulza con miel al gusto.
“El árbol milagroso, el árbol de la vida, el árbol del aceite de ben o el árbol del rábano picante”, indica Medical News Today sobre los otros nombres que tiene la moringa.
De acuerdo con el mencionado portal, la moringa es rica en nutrientes como:
- Vitamina A.
- Vitamina B1 (tiamina).
- B2 (riboflavina).
- B3 (niacina), B-6.
- Folato y ácido ascórbico (vitamina C).
- Calcio.
- Potasio.
- Hierro.
- Magnesio.
- Fósforo.
- Zinc.
Además de ayudar para adelgazar, la moringa es ideal para proteger la piel y el cuidado del cabello. Contiene proteínas que protegen las células de la piel de los daños que puede sufrir, también es rica en hidratantes y desintoxicantes, que potencian la piel y el cabello.
Al contener calcio y fósforo, la moringa es ideal para el cuidado de los huesos. Gracias a sus propiedades antiinflamatorias, ayuda a tratar afecciones como la artritis y “puede curar huesos dañados”, indica Medical News Today.
Según el portal, la moringa reduce la gravedad de algunos ataques de asma y “se ha demostrado que ayuda a mejorar la función pulmonar y la respiración en general”.
Por otra parte, esta planta ayuda a disminuir el riego de sufrir de cálculos renales, pues los antioxidantes pueden ayudar a los niveles de toxicidad en los riñones.