Las proteínas son uno de los nutrientes esenciales para que el organismo pueda realizar todas sus funciones. Como tal, cada célula del cuerpo humano las contiene; sin embargo, es necesario consumir proteínas en la dieta para ayudar al cuerpo a reparar células y producir células nuevas, según información de Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Por lo general, los alimentos proteínicos suelen descomponerse en partes llamadas aminoácidos cuando el organismo hace el proceso de digestión, de modo que el cuerpo humano requiere un gran número de aminoácidos en cantidades suficientemente grandes para mantener una buena salud.
Cabe mencionar que existen tres clases de aminoácidos, los esenciales que no los puede producir el cuerpo y deben ser proporcionados por los alimentos; los no esenciales que son producidos por el cuerpo a partir de los aminoácidos esenciales o en la descomposición normal de las proteínas; y los condicionales que son necesarios en momentos de enfermedad y estrés.
Ahora bien, se debe tener en cuenta la cantidad de proteína que necesite cada persona, pues esta dependerá de las necesidades generales de calorías. Medline Plus, explica que “la ingesta diaria recomendada de proteína para los adultos saludables es de 10 % a 35 % de sus necesidades calóricas totales. Un gramo de proteína proporciona 4 calorías. Por lo tanto, una persona que consume una dieta de 2,000 calorías podría comer 100 gramos de proteína, o 400 calorías de proteína, lo que proporcionaría el 20 % de su total de calorías diarias”.
Los nutricionistas aconsejan consumir alimentos ricos en proteínas como: lácteos, granos enteros, cortes magros de carne de res o de cerdo y pescados o mariscos, pero estos no son los únicos alimentos ricos en este importante nutriente.
El portal web La Nación también destaca la ingesta de espirulina, un tipo de alga microscópica que se encuentra en agua dulce y salada que pertenece a la categoría de las cianobacterias, también conocidas como algas verde-azuladas que es considerado un superalimento con un alto contenido nutricional.
Particularmente, este ingrediente, muy consumido por los vegetarianos y veganos, es rico en proteínas y se considera una excelente fuente de aminoácidos esenciales, que son los bloques de construcción de las proteínas. El portal en mención también señala que contiene vitaminas del complejo B, hierro, beta-caroteno, vitamina E y otros nutrientes esenciales.
¿Cómo consumir la espirulina?
De acuerdo con los expertos, este ingrediente popular es un suplemento dietético que se puede consumir en forma de tabletas, cápsulas o en polvo. Asimismo, se puede agregar a batidos, zumos y alimentos para obtener un impulso nutricional adicional que a su vez aumenta la energía y el rendimiento deportivo, mejora de la salud del sistema inmunitario, estimula la promoción de la salud cardiovascular y la reducción de la inflamación del cuerpo.
Otros beneficios de la espirulina
La medicina tradicional ofrece múltiples remedios caseros a base de ingredientes naturales que ayudan a atenuar las manchas en la piel. Uno de los más recomendados es la mascarilla de alga espirulina, que posee beneficios antioxidantes que ayudan a eliminar las células muertas u otras impurezas de la piel.
Según el portal Cuidate Plus, la espirulina es un alga unicelular azul verdosa que se caracteriza por ser una fuente importante de proteínas, vitaminas y minerales. Por lo general, es utilizada en polvo o en forma de tabletas, aunque también se puede obtener en fresco. En cuanto a la protección de la piel, esta alga ayuda también a tratar los brotes de acné, gracias a sus efectos antiinflamatorios naturales, y reduce los efectos de los síntomas de la rosácea debido a las vitaminas B12, B6, B3 y B2.
Para realizar una mascarilla de espirulina para aclarar la piel, el portal web La Unión detalla cómo hacerla:
Ingredientes:
- Una hoja de alga deshidratada o 2 cápsulas de alga espirulina
- 2 cucharadas soperas de agua
Preparación y uso: en el caso de la hoja de alga deshidratada, se debe remojarla con agua e irla pegando en la piel. Lo ideal es cortar pedazos pequeños y colocarlos directamente en las partes donde se quiere aclarar la piel. Si se utiliza el polvo de espirulina, solamente se debe mezclar con un poco de agua e ir colocando la mezcla en el rostro con ayuda de una brocha y dejarla actuar solo por cinco minutos. Para retirarla, se debe hacer con agua fría y luego aplicar crema humectante.