Sufrir de un colon irritado implica ver afectadas las actividades de la vida cotidiana debido a factores como cólicos, gases o diarrea, que pueden hacer pasar momentos incómodos o vergonzosos. De ahí la importancia de ponerle la atención requerida desde el punto vista médico.
El colon es el responsable de la última parte del proceso de digestión, donde se deben almacenar los residuos de alimento a los que ya se les extrajeron los nutrientes que el cuerpo requería. Por esa razón, el colón ocupa la mayor parte del intestino grueso, y debe preparar y almacenar las deposiciones.
Debido a esa importante función en el proceso de digestión, es importante mantener esta zona en óptimas condiciones, para ello es clave tener una muy buena alimentación, además de limpiar o depurar el colon periódicamente.
El síndrome de colon irritable (SCI) es un trastorno frecuente que afecta al intestino grueso. Los signos y síntomas incluyen cólicos, dolor abdominal, hinchazón del abdomen, gases y diarrea o estreñimiento; en algunos casos pueden aparecer estos síntomas al tiempo.
Ahora bien, al hablar de una posible solución a este síntoma, se puede tener en cuenta la cúrcuma, que es una especia muy utilizada en la culinaria como colorante, pero sus propiedades son tan amplias que su consumo va en aumento, ya que ayuda a reducir el colesterol, prevenir la diabetes, aliviar el dolor y hasta ayudar con el Alzheimer, entre otros.
La cúrcuma es miembro de la familia Zingiberácea o jengibre. Es originaria del Sureste Asiático, donde suma ya unos 25 siglos de uso culinario. Y si se habla de uso medicinal, se la conoce por tener propiedades contra el cáncer, el colesterol alto o la artrosis, entre otras enfermedades.
Algunos de los beneficios que se pueden obtener al consumir una especia como la cúrcuma, según el portal El Universal, pueden ser:
- Mejora la digestión.
- Facilita la pérdida de peso.
- Combate resfriados y gripas.
- Evita la crisis de asma.
- Desintoxica el hígado.
- Regula la flora intestinal.
- Estimula el sistema inmune.
Pero esto no es todo, es una gran aliado para combatir la enfermedad de Alzheimer. “La cúrcuma puede ayudar a prevenir que el aminoácido amiloide-β (presente en los cerebros de las personas con la enfermedad), se genere. Ello debido a que la especia tiene la capacidad de atravesar la barrera hematoencefálica, alcanzar las células cerebrales y proteger las neuronas de diversas agresiones tóxicas del envejecimiento y del amiloide-β en los seres humanos, por lo que contribuye a alejar los síntomas de la enfermedad”, indica el portal.
Para aprovechar de una mejor manera todas las propiedades de la cúrcuma en pro de contrarrestar el Alzheimer y el intestino irritable, esta se debe consumir en té o infusión. La persona puede preparar el té de cúrcuma usando polvo puro de cúrcuma o cúrcuma rallada, molida o deshidratada.
Ingredientes:
- 1 taza de agua o leche.
- 1 cucharadita de cúrcuma.
- 1 cucharadita de canela.
- 1 cucharada de miel.
- 1/2 cucharadita de pimienta negra.
Preparación:
- Hervir el agua o la leche.
- Añadir los demás ingredientes al líquido hirviendo.
- Sumergir durante 10 a 15 minutos.
Después de completar estos pasos, es aconsejable colar el té en un recipiente y dejar que se enfríe antes de beberlo.
Recuerde que la recomendación principal antes de tomar decisiones por sí mismo, es acudir a un profesional de la salud que lo pueda guiar según los problemas o síntomas que esté presentando, pues debe tener en cuenta que no todos los cuerpos reaccionan de igual manera ante ingestas de alimentos o infusiones y esto podría tener otras consecuencias como ayudar a aliviar ciertos dolores pero generan otros en diferentes partes.