El hibisco o flor de jamaica es una planta originaria del África y se le atribuyen diversas propiedades medicinales. Es rica en antioxidantes como las antocianinas, las cuales según la revista científica Food and Chemical Toxicology ayudan a prevenir lesiones e inflamación del hígado.

Su nombre científico es Hibiscus Sabdariffa y puede ingerirse en forma de té, infusión, cápsulas e incluso en algunos países es utilizada para preparar algunos platos culinarios, precisa el portal de bienestar y salud Tua Saúde.

Se dice que esta planta tiene propiedades antihipertensivas, antidiabéticas, vasodilatadoras, antioxidantes, antimicrobianas, hipolipemiantes, hepatoprotectoras, antiinflamatorias y antiobesidad.

Una de las principales bondades que se le atribuyen es que ayudaría a regular la presión arterial, gracias a que favorece el relajamiento de los vasos sanguíneos. De hecho, algunos estudios científicos indican que la ingesta regular de hibisco ejercería un efecto similar al de algunos medicamentos antihipertensivos, como el captopril, por ejemplo. No obstante, no se debe sustituir el tratamiento indicado por el médico, pues se necesitan más análisis científicos que lo avalen.

El té de hibisco ayudaría a controlar los niveles de colesterol | Foto: Getty Images

En un estudio cuyos resultados se dieron a conocer en la revista académica The Journal of Nutrition, los adultos con hipertensión (presión arterial alta) que consumieron tres porciones, unos 720 mililitros de té de hibisco al día, experimentaron una disminución en su presión arterial normal.

De igual forma, un artículo del diario El Universal de México cita una revisión de estudios realizada por Journal of Hypertension, en la que se determinó que el alto contenido en polifenoles, antocianinas y polisacáridos presentes en esta planta, tienen diversos beneficios para la salud cardiovascular.

Precisamente uno de ellos es que ayudaría a reducir el colesterol “malo” LDL y los triglicéridos y aumentaría el “bueno” HDL. Esto sería el resultado de una supresión en la síntesis de ácidos grasos en el hígado, lo que favorece la quema de grasas en el organismo y disminuye la absorción de los triglicéridos a nivel intestinal.

Controla el azúcar

El consumo de té de hibisco también sería favorable para regular el azúcar en la sangre, debido a que inhibe la actividad de algunas enzimas pancreáticas e intestinales que se encargan de la digestión de los carbohidratos en el intestino delgado, evitando picos de glucemia y una excreción excesiva de insulina, ayudando a prevenir el desarrollo de la diabetes y a mejorar la condición de las personas que la padecen, precisa Tua Saúde.

De otro lado, el portal Cuerpo Mente indica que el hibisco o la flor de jamaica es un remedio favorable para despertar el apetito, combatir la acidez estomacal, las indisposiciones gastrointestinales con espasmos y la gastroenteritis.

Este sitio web asegura que se trata de un laxante suave, que estimula el movimiento peristáltico de los intestinos y favorece la evacuación, por lo que se recomienda para prevenir y hacerle frente a los problemas de estreñimiento.

Otra bondad de la que se habla es que los polifenoles protegen a las células contra el estrés oxidativo. La Universidad de Michigan explica que el estrés oxidativo se relaciona con padecimientos tales como la obesidad, el lupus, la enfermedad de alzhéimer, diabetes, problemas oculares, afecciones cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.

Finalmente, se ha usado como tranquilizante para ayudar a controlar ataques de ansiedad y mitigar el insomnio. En momentos de tensión y nerviosismo, puede ayudar a relajarse y tranquilizarse, asegura Cuerpo Mente.

¿Cómo preparar la bebida?

Para preparar un té de hibisco se requiere de cucharada de flores deshidratadas y 400 mililitros de agua hirviendo.

Se agregan las flores en el agua caliente, se deja reposar durante cinco minutos, se cuela y se bebe tibio o frío, tres veces al día. Para la pérdida de peso, se recomienda ingerir una taza de este té después de las comidas. Tua Saúde dice que para controlar la presión arterial, un estudio clínico indica que tomar el té de hibisco a diario, dos horas después de cada comida y durante cuatro semanas como mínimo, podría mejorar esa condición.

Sin embargo, siempre es importante tener presente que no es un tratamiento y tampoco reemplaza los medicamentos ordenados por los especialistas, por lo que siempre es importante consultar antes de iniciar su ingesta de manera regular.