La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que “la hipertensión es el principal factor de riesgo para sufrir una enfermedad cardiovascular. Cada año ocurren 1.6 millones de muertes por enfermedades cardiovasculares en la región de las Américas, de las cuales alrededor de medio millón son personas menores de 70 años”.
Dentro de los riesgos de que se eleve la presión arterial se encuentra un alto consumo de sal, alcohol e inactividad física, por lo que las entidades de salud junto a sus expertos recomiendan modificar hábitos malsanos para reducir el riesgo de cualquier afección.
“La hipertensión afecta entre el 20-40 % de la población adulta de la región y significa que en las Américas alrededor de 250 millones de personas padecen de presión alta”, agrega la OMS.
Es entonces que dentro de los síntomas de la hipertensión se encuentran los dolores de cabeza, el sangrado y la dificultad para respirar. Sin embargo, en algunos caso los signos no son perceptibles, considerada esta enfermedad como silenciosa.
El tipo de azúcar que hace subir la presión arterial
Si bien es importante mantener una dieta balanceada donde se incluyan frutas y verduras ricas en minerales y vitaminas, también se debe reconocer aquellas que tienen muchos beneficios sobre la salud del cuerpo, como por ejemplo, las compuestas de potasio, que pueden ayudar a regular la tensión.
Resulta que de acuerdo con la Clínica Mayo, el potasio tiene la capacidad de controlar la sangre del cuerpo más específicamente en las células, contribuyendo en la salud del corazón. “Los niveles bajos de potasio pueden deberse (...) a determinadas enfermedades, incluida la deshidratación” o a un déficit de este mineral en la dieta, menciona la entidad médica estadounidense.
No obstante, existen otros alimentos no tan favorables para la hipertensión. Según Infosalus, un estudio de la Universidad de Colorado señala que el consumo de alimentos con fructosa podrían aumentar la presión arterial alta.
De ahí que bebidas procesadas con jarabe de maíz con contenidos altos de fructosa pueden ser perjudiciales para la salud, que tal y como lo menciona, Middlesex Health es “un edulcorante común en los refrescos y las bebidas con sabor a frutas”, similar al azúcar de mesa.
La investigación concluyó con información recogida de cuestionarios sobre el plan de alimentación de 4.528 personas sin antecedentes de presión arterial alta, que quienes consumían por lo menos 74 gramos al día de azúcar eran propensos a tener hipertensión.
La fructosa y su relación con el cáncer
El Instituto Nacional del Cáncer (NCI) asegura que un estudio evidencia las probabilidades del desarrollo de cáncer colorrectal tras la ingesta excesiva de fructosa, que es el principal azúcar que se encuentra de manera natural en la miel y las frutas.
El artículo publicado en el mes de octubre de 2021, advierte que dicha investigación se llevó a cabo en ratones y arrojó resultados sobre edulcorantes presentes tanto en el jarabe de maíz, como en el azúcar refinada, que no favorecen la salud.
El estudio titulado ‘La fructosa en la dieta mejora la supervivencia de las células intestinales y la absorción de nutrientes’, presidido por Marcus Goncalves, MD, Ph.D., de Weill Cornell Medicine, entre otros, asegura que no solo la fructosa se ve relacionada con el cáncer, sino también con la obesidad siendo principales causas de muerte en el mundo.
Aunque esta investigación fue realizada en ratones, aún se adelantan estudios sobre los humanos porque aunque el jarabe de maíz o la fructosa tuvo una mayor incidencia en los roedores alimentados con ella, los investigadores entienden que estos animales tienen su tracto digestivo más corto que el de los seres humanos.