Muchos se preguntan cuál es la mejor dieta que se debe llevar a cabo para poder adquirir todos los nutrientes y vitaminas que el cuerpo necesita. Cabe mencionar que a la hora de elegir una dieta influyen aspectos económicos, de accesibilidad y de preferencia. Los especialistas aseguran que se deben consumir alimentos de todos los grupos y que se deben ingerir frutas de todos los colores. La dieta mediterránea es una de las más recomendadas por los especialistas.

El doctor Gurutz Linazasoro, portavoz de la Sociedad Española de Neurología, dijo a la BBC Mundo que “el patrón dietético que más se ha estudiado es la dieta mediterránea. Se sabe que disminuye el riesgo de padecer alzhéimer y párkinson, también disminuye el de sufrir enfermedades cardiovasculares y baja el nivel de riesgo de obesidad, que indirectamente también induce sobre la salud cardiovascular”.

Por otra parte, el profesor de nutrición clínica de la Universidad de Florencia, Italia, Francesco Sofi, aseguró que no es coincidencia que la dieta mediterránea sea muy colorida. “Seguir la dieta mediterránea tradicional significa que consumes diferentes nutrientes y fitonutrientes”, aseguró el especialista.

Deanna Minich, nutricionista y doctora en la Universidad de Western States en Oregón, Estados Unidos, aseguró que si le falta un color del arcoíris a la dieta es posible que se estén perdiendo algunos nutrientes importantes para la salud del cuerpo. “Si nos falta un color del arcoíris (en la dieta), es posible que nos falte la función de ese alimento”, enfatizó Minich.

¿Qué es una dieta mediterránea?

Esta dieta incluye muchos vegetales, frutas, legumbres, cereales y productos ricos en carbohidratos saludables como el pan integral, la pasta y el arroz integral. También contiene cantidades moderadas de pescado, carnes magras blancas y algunos productos lácteos. Cabe mencionar que en esta dieta se usa para cocinar el aceite de oliva extravirgen.

Cada fruta tiene sus propios nutrientes; los flavonoides son los que generalmente le aportan el color a las frutas y verduras. Los alimentos de color morado, como los arándanos, tienen un alto contenido de un pigmento vegetal llamado antocianina, el cual está relacionado con una disminución en el riesgo de enfermedades cardíacas y diabetes. Las flavonas, que le dan a los alimentos un color amarillo, pueden reducir el riesgo de padecer enfermedades coronarias.

Después de seguir la dieta de 50.000 personas por más de 20 años, Tian-shin Yeh, investigadora de epidemiología de la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard, encontró que aquellos que comen más alimentos ricos en flavonoides, incluyendo naranjas, pimentones, apio y toronjas, tienen menores niveles de deterioro cognitivo y demencia.

Hasta el momento no existe una cura para la demencia y el deterioro cognitivo, sin embargo, la investigadora aseguró que comer alimentos ricos en flavonoides puede ayudar a disminuir el riesgo. Yeh enfatizó que comer una dieta colorida puede ayudar a las personas a evadir posibles efectos adversos por comer una sola comida demasiadas veces.

Cabe mencionar que Victoria Taylor, nutricionista principal en la British Heart Foundation, aseguró que seguir una dieta arcoíris puede tornarse bastante complejo. “Puede ser realmente complicado ingerir todos los colores todos los días. Podrías hacerte un lío”. La especialista agregó que se necesita comer también alimentos de otros grupos alimenticios.

Algunos especialistas recomiendan incluir en la dieta frutas y verduras de todos los colores. | Foto: Jamesmcq24

Minich enfatizó que la dieta arcoíris no se limita a ingerir frutas y vegetales, sino que también incluye otras comidas naturales, como hierbas, especies, legumbres, nueces, semillas, cereales integrales e incluso té. “Si comes la misma fruta, te sentirás lleno en seguida. Pero si optas por un plato con frutas y vegetales de distintos colores, es probable que quieras comer más”, aseguró Rochelle Embling, estudiante de doctorado en la Universidad de Swansea.

En conclusión, lo mejor es incluir en la dieta la mayor cantidad de frutas y verduras y variarlas para poder consumirlas todas, sin olvidar las proteínas y los carbohidratos saludables. Cabe mencionar que es importante acudir a un nutricionista que brinde una dieta adecuada para cada persona teniendo en cuenta su edad y las patologías específicas de cada quien.