Los eructos, aunque son un efecto natural luego de la digestión de cualquier tipo de alimentos, en el pensamiento popular se ven mal vistos cuando una persona eructa al frente de otra. Sin embargo, de acuerdo con la explicación de la Clínica Mayo, son naturales y comunes, que se asocian con los gases intestinales.
Señala que los “eructos son la forma que tiene el cuerpo de expulsar el exceso de aire del tracto digestivo superior”, es decir que es “aire acumulado en el esófago”, ya que no alcanza a llegar al estómago, siendo muchas las causas posibles de ellos, como:
- Masticar chicle
- Conversar mientras se come
- Consumir bebidas carbonatadas
- Fumar
No obstante, aunque este tipo de flatulencia es común, en muchos casos se ve asociado con otras enfermedades que los provocan.
Enfermedades con eructos constantes
La organización estadounidense de ciencia y salud asegura que tanto el reflujo como la infección de H. pylori, pueden generar eructos constantes, acompañados de otros síntomas:
Reflujo Gástrico
El reflujo es aquella afección en la cual los líquidos del estómago se devuelven por el esófago, conocido como enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE). La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, señala que se desarrolla en quienes son obesos, consumen cigarrillo o alcohol.
Es de mencionar que aquellos que luego de comer se acuestan a dormir tienen altas probabilidades de padecer reflujo, por lo que la entidad recomienda reposar un tiempo prolongado. Asimismo, las mujeres en estado de embarazo también son propensas a sufrir reflujo.
La sensación que produce ERGE es acidez gástrica, náuseas, hipo, tos, devolución del alimento, dolor de garganta, eructos constantes “al promover el aumento de la deglución”, entre otros.
Es entonces que para prevenirlo, o quizá combatirlo, Harvard Medical School, explica en una de sus publicaciones, a través del gastroenterólogo Vikram Rangan, los hábitos que se encontraron para reducir su aparición.
Dentro del estudio de JAMA Internal Medicine reconocieron cinco variables presentes en algunos participantes de la investigación que condujeron a reducir las probabilidades de desarrollar ERGE en los que se encontraron:
- El no consumo de cigarrillos.
- La realización regular de ejercicio por lo menos 30 minutos diarios.
- El consumo máximo de dos tazas de café, refresco o té al día.
- Una dieta balanceada rica en verduras y cereales integrales.
- Tener un peso corporal adecuado.
Infección por Helicobacter pylori
La infección por Helicobacter pylori es provocada por la bacteria H. pylori que causa úlceras o lesiones en el estómago.
Es una enfermedad silenciosa porque son muy pocos los que perciben sus síntomas, ya que generalmente no se desarrolla alguno. No obstante, las náuseas, el dolor agudo en el estómago, la inflamación, la pérdida de peso y los eructos frecuentes, son los signos más relevantes.
Cabe mencionar que la Clínica puntualiza que en algunos otros casos esta infección se relaciona con la gastritis.
La ciencia considera que esta bacteria se propaga, generando infección de una persona a otra, por medio de heces, vómito, y saliva; los factores de riesgo más relevantes en esta enfermedad son la contaminación del agua, el hacinamiento o la interacción con una persona contagiada.
Es de mencionar que cuando no es tratada la enfermedad, surgen complicaciones como la inflamación en la mucosa del estómago, úlceras severas y/o cáncer de estómago que aunque no es el más común, sus síntomas pueden traer graves complicaciones.
El Instituto Nacional del Cáncer (NCI) precisa que en esta enfermedad las células cancerosas cubren el estómago, y el desarrollo de los síntomas en la etapa inicial pueden ser silenciosos, en algunos casos.