La apariencia y salud de la piel es un tema que preocupa a muchas personas, quienes procuran tratar adecuadamente las afecciones dermatológicas y las consecuencias del envejecimiento natural.

Es así que el tema ha capturado también un espacio en redes sociales e internet, en que hoy se comparten múltiples remedios caseros, tratamientos, rutinas de cuidado de la piel y otra serie de recomendaciones para lucir una dermis increíble. Pero, en contraste, también existe una que otra publicación que enseña los riesgos de no prestar atención a las impurezas de la piel, ¿o quién no ha visto los videos virales en que explotan granitos o sacan puntos negros?

Pues bien, pese a que este tipo de contenidos han ganado muchos adeptos, los expertos concuerdan en que la práctica de reventar las espinillas puede tener más contras que pros, si se realiza incorrectamente.

Cerca de un joven atractivo con piel problemática y cicatrices de acné se ve en el espejo del baño | Foto: Getty Images

Y es que en lo que respecta al acné se debe ser especialmente precavido, puesto que es una enfermedad dermatológica que debe manejarse teniendo en cuenta si la piel tiene mayor tendencia grasa o seca, si existen otras condiciones de salud de base que la provoquen o si responde a factores hereditarios.

De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, el acné es una afección frecuente que puede padecer cualquier persona y consiste en la formación de espinillas debido a los taponamientos de los folículos pilosos, también llamados poros.

“El tipo de acné que tienen muchos adolescentes se llama acné vulgaris. Suele aparecer en la cara, el cuello, los hombros, la parte superior de la espalda y el pecho”, indican desde la organización Kids Health.

¿Es bueno explotar los granos y espinillas?

Las personas que han sufrido acné alguna vez en su vida saben lo satisfactorio que puede llegar a ser reventarse un granito -cabe decir que no es una práctica del agrado de todos-; sin embargo, este hábito puede dar alivio solo por algunos minutos, ya que puede incrementar la inflamación e inclusive agravar la espinilla.

De acuerdo con la dermatóloga Claire Chang, consultada por el medio Live Strong, indica que esta es una técnica que únicamente debe realizarse por los profesionales o siguiendo sus recomendaciones, pero de ninguna manera hacerla sin seguir las medidas adecuadas.

“Reventar, pellizcar y manipular un grano puede irritarlo y hacer que se rompa debajo de la piel”, agregó la especialista. De esta manera, la lesión que podía curarse en una semana (el tiempo que generalmente demora en desaparecer un grano) puede tardarse más en recuperarse, a su vez que se propicia la acumulación de bacterias, porque se expone más la herida a la suciedad.

“Si bien es menos común, en casos severos, esto puede incluso conducir a un absceso (una dolorosa bolsa de pus)”, precisó además la doctora Chang.

El riesgo más serio de esta práctica, según señalan desde el portal Elle, es que la herida puede dejar una cicatriz o mancha permanente en el rostro, la cual no es tan sencilla de eliminar.

En ese sentido, los expertos coinciden en que lo mejor es acudir ante un profesional y que sea este quien determine el tratamiento a seguir, bien sea con lociones, cremas o geles para la piel o un abordaje con medicamentos.

Si, en cambio, resulta imposible evitar la tentación de reventarse el granito, lo mejor es hacerlo con todo el cuidado posible, procurando tener las manos limpias, preferiblemente lavadas con agua y jabón justo antes de hacerlo. También, en vez de usar las uñas, como comúnmente sucede, se recomienda emplear un pañuelo.

Para ello, lo primero es poner una compresa tibia sobre la zona en la que está la espinilla y luego presionar con el pañuelo limpio el grano, sin pellizcar, ni hacer demasiada fuerza.