La sandía es una de las frutas favoritas de muchas personas y de casi la mayoría de los niños. Su vibrante y excéntrico color, su sabor cítrico y su capacidad refrescante, la hacen una de las frutas más apetecidas en el mundo.

Sin embargo, es consumida con moderación ya que detrás de ella se esconden múltiples mitos sobre los peligros de su consumo, uno de los más repetitivos es que es perjudicial si se come de noche, ¿pero podría ser esto verdad?

Para todos los amantes de la fruta, la buena noticia es que esto no es del todo cierto. El mito de que hace daño comerla de noche es totalmente falso; se puede comer todo tipo de fruta a cualquier hora del día, lo que sí es importante mencionar es que no se deben ingerir en exceso.

De acuerdo con la experta en nutrición Fernanda Alvarado, el consumo de sandía por las noches no provoca algún malestar estomacal como se tiene la creencia. Lo que ocurre es que los niveles de azúcar que esta fruta aporta resultan inconvenientes si se ingiere de noche, ya que es de los alimentos con índice glucémico más alto.

Esto quiere decir que, al consumirla, se elevará el nivel de azúcar en la sangre, y esto podría resultar perjudicial por la noche, debido a la falta de actividad que las personas tienen mientras duermen.

Dormir bien puede ayudar a controlar los niveles de glucemia. Foto: GettyImages. | Foto: Gettyimages

Por esta razón, se recomienda comerla por las mañanas o en la tarde antes de una rutina de ejercicio.

Ahora bien, durante la noche el cuerpo segrega hormonas opuestas a la insulina con el objetivo de regular la cantidad de glucosa en la sangre, sin embargo, la resistencia entre ambos tipos de hormonas provocará que se eleven y los picos altos de insulina a la larga tienen consecuencias como aumento de peso, riesgo de padecer diabetes, obesidad y mermar horas de sueño.

Beneficios de la sandía

Mejora el sistema inmunológico y previene de daños celulares

  • Esta fruta es rica en vitamina C, que es esencial para el sistema inmunológico y, por lo tanto, protege el cuerpo y ayuda a combatir, por ejemplo, los resfriados.
  • Asimismo, mantiene el equilibrio redox de las células y las protege de especies reactivas al oxígeno, que dañan las células del organismo y el ADN, según el portal Psicología y Mente, en su sección de salud y bienestar.

Cicatriza las heridas cicatrización de heridas

  • El papel de la vitamina C en la curación de heridas también se ha observado en numerosos estudios, ya que es esencial para la formación de nuevo tejido conectivo.
  • Las enzimas que participan en la formación de colágeno, es decir, el componente principal de la cicatrización de heridas, es ineficiente sin vitamina C. En definitiva, la sandía participa en la curación de las heridas.

Mejora la salud ósea

  • El licopeno dietético, que está presente en algunos alimentos como la sandía o los tomates, reduce el estrés oxidativo que normalmente aminora la actividad de osteoblastos y osteoclastos, dos células óseas involucradas en la patogénesis de la osteoporosis.

Mejora la salud cardiovascular.

  • Consumir sandía en grandes cantidades, según muchas investigaciones, correlaciona positivamente con la mejora de la función cardiovascular, ya que incrementa el flujo sanguíneo a través de la vasodilatación.
  • Un estudio llevado a cabo por el American Journal of Hypertension encontró que la suplementación de extracto de sandía reduce la presión arterial de tobillo, la presión arterial braquial y la presión de la carótida en los adultos obesos de mediana edad con hipertensión leve.