Una de las enfermedades más incómodas que padecen a diario tanto hombres como mujeres es hongos en las uñas; aunque es una afección común, tiende a ser desagradable ante el ojo humano cuando se está en un espacio público como en la playa o la piscina.
Los hongos en las uñas también se conocen comúnmente como onicomicosis y es cuando se presenta una decoloración blanca, café o amarilla, que puede presentarse en una uña y luego extenderse a otros dedos de los pies. Esta afectación también puede ocasionar que las uñas se engrosen o quiebren.
Aunque esta es la más común, existe la onicomadesis, un signo poco conocido que consiste en la separación o el despegamiento (parcial o completo) indoloro y sin inflamación de la lámina del lecho ungueal, es decir la uña, y apareciendo por debajo una nueva. Esta enfermedad también puede afectar las uñas de las manos.
Por ese motivo, es importante combatir esta enfermedad, más teniendo en cuenta que es altamente infecciosa por la exposición de algunos medicamentos.
Causa de la onicomadesis
Si se observan cambios en el crecimiento de la lámina ungueal en los pies hay que consultar al podólogo de confianza; son necesarias pruebas complementarias en caso de que se sospeche alguna causa sistémica o un agente infeccioso local, que son:
Causas locales
- Paroniquias agudas: inflamación de tejido periungueal que cursa con eritema, dolor y aumento de la temperatura local, asociado o no a contenido purulento. El agente causal más común es Staphyloccocus auresus, aunque también puede deberse a causas virales (panadizo herpético) o fúngicas (paroniquia candidiásica).
- Trauma local: son lesiones externas o internas del organismo.
Causas sistémica
- Desnutrición.
- Patologías no dermatológicas como cutaneomucosas provocadas por diversas sustancias, en general medicamentos ya sea por vía tópica, oral o parenteral que pueden afectar a la piel, mucosas o anejos cutáneos.
- Reagudización de enfermedades sistémicas graves. Patologías dermatológicas.
- Patologías no dermatológicas como: la enfermedad de Kawasaki, la escarlatina, la enfermedad Boca-Mano-Pie, la trombocitopenia, ciertas alteraciones neurológicas y el lupus eritematoso sistémico.
- Administración de algunos medicamentos: como antibióticos (penicilina, cloxacilina, azitromicina), retinoides, litio, fármacos anticonvulsivantes, tratamiento con citotóxicos.
- Factor hereditario como la onicomadesis congénita, posiblemente en relación con el estrés del parto.
¿Onicomadesis en niños?
El desprendimiento completo de la uña (onicomadesis) es poco frecuente en la infancia y produce alarma entre los familiares, pero puede deberse a una variedad de patologías locales y sistémicas o aparecer tras la exposición a determinados fármacos, aunque la mayoría de los causas son desconocidas.
¿Cómo curar la onicomicosis avanzada?
El médico puede recetar medicamentos antifúngicos que se pueden tomar por vía oral o aplicar sobre la uña. En algunas situaciones, es necesario realizar una cirugía.
- Medicamentos antifúngicos por vía oral. Estos medicamentos suelen ser la primera opción, dado que eliminan la infección de forma más rápida que los medicamentos tópicos. Las opciones comprenden la terbinafina (Lamisil) y el itraconazol (Sporanox). Estos medicamentos contribuyen a que crezca una nueva uña libre de infección, que reemplaza lentamente la parte infectada.
- Esmalte de uñas con medicamentos llamado «ciclopirox» (Penlac). Se usa para pintar las uñas infectadas y la piel que las rodea una vez por día. Los expertos recomiendan usar este tipo de esmalte de uñas todos los días durante un año, aproximadamente.
- Crema de uñas con medicamentos que son antifúngicos, que se deberá pasar sobre las uñas infectadas después de remojarlas. Esto ayuda a que el medicamento penetre la superficie dura de la uña y llegue al hongo que se encuentra debajo.
- Algunas infecciones de hongos en las uñas no responden a estos medicamentos. Por lo que es recomendable una cirugía para extraer permanente de la uña si la infección es grave o extremadamente dolorosa.