Con el paso de los años, llega la etapa del envejecimiento, que es cuando más se diagnostican diversos padecimientos. Uno de los órganos más afectados ante la llegada de este momento de la vida es el cerebro. Cabe mencionar que algunas de estas enfermedades suelen surgir por antecedentes hereditarios y genéticos; otras surgen a causa de la edad, y algunas otras por factores alimenticios o dependiendo del tipo de vida que ha llevado cada persona.
Entre los síntomas más comunes y temidos por las personas, está la pérdida de la memoria y la concentración, que a la vez es uno de los diferentes síntomas de la demencia. Cuando esto aparece, automáticamente alerta a los profesionales de la salud y a los seres queridos de la persona, que buscan entender por qué está sucediendo y cómo se puede contrarrestar.
Afirman los expertos de la Alzheimer’s Association que, así como ocurre “con el resto de nuestro cuerpo, el cerebro cambia a medida que envejecemos. La mayoría de nosotros en algún momento notaremos una capacidad de pensamiento más lenta y problemas ocasionales para recordar ciertas cosas”.
Existe una vitamina que es valorada por los beneficios que le aporta al cuerpo y especialmente al cerebro, en cuanto a la memoria y la concentración. Esta es el zinc, el cual es una vitamina que se puede consumir de diferentes maneras y traerá los mismos nutrientes y beneficios para los seres humanos.
Una investigación realizada por expertos del Centro Médico de la Universidad de Duke, en Durham, y del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), afirma que el zinc es un nutriente indispensable para las células del cerebro, que son las encargadas de formar los recuerdos.
Según lo publicado por la revista Muy Interesante, los investigadores de dicho estudio de la revista Neuron, han observado que el zinc tiene cierta acción mientras regula la comunicación entre las neuronas del hipocampo, donde se producen los procesos de aprendizaje y memoria, y donde una perturbación de la comunicación puede contribuir a la epilepsia.
Las mayores concentraciones de zinc del cerebro se encuentran entre dichas neuronas del hipocampo, por lo que desempeñan un papel fundamental en la comunicación entre las células nerviosas. Incluso, los investigadores del estudio han confirmado que la eliminación del zinc de las vesículas de ratones, genéticamente modificados, afecta una buena comunicación.
“El aumento del neurotransmisor glutamato aumenta la comunicación mediada por el zinc. Un aumento excesivo de la comunicación de las células nerviosas que contienen zinc produce y empeora la epilepsia”, afirma el portal web Muy Interesante.
El zinc, la vitamina C y la vitamina E son los principales aliados de las personas que pretenden cuidar su memoria y que quieren mantener sanas sus funciones cognitivas. Ya que una dieta rica en estas vitaminas no solo protegerá a la persona para en un futuro no sufrir de pérdida de la memoria, sino que además le permitirá tener un cerebro más fuerte y activo, por lo que la concentración aumentará y podrá rendir mejor cognitivamente en el día a día.