El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) es un tipo de alteración mental, resultado de la mezcla de algunos problemas persistentes como lo es la dificultad para prestar atención, hiperactividad y conducta impulsiva.

Cuando un adulto padece de esta enfermedad, tiende a tener relaciones inestables, mal desempeño en el trabajo o en la escuela, baja autoestima y otros problemas.

De acuerdo con el portal Mayo Clinic, en adultos se le denomina a esta afección como TDAH y presenta síntomas iniciales en la primera infancia y se desarrollan en la adultez. Y en varias ocasiones, esta enfermedad no se detecta hasta la etapa de la adultez, y aunque en estos puede que baje la hiperactividad, pueden seguir con la impulsividad, la inquietud y la dificultad para prestar atención.

El tratamiento de esta enfermedad en adultos incluye medicamentos, asesoramiento psicológico (psicoterapia) y tratamiento para cualquier afección de salud mental que se presente junto con el TDAH.

Algunos de los síntomas del TDAH en adultos son:

  • Impulsividad
  • Desorganización y problemas para establecer prioridades
  • Escasas habilidades para administrar el tiempo
  • Problemas para concentrarse en una tarea
  • Problemas para realizar múltiples tareas a la vez
  • Actividad excesiva o inquietud
  • Escasa planificación
  • Baja tolerancia a la frustración
  • Cambios de humor frecuentes
  • Problemas para realizar tareas y terminarlas
  • Temperamento irascible
  • Problemas para enfrentar el estrés

El portal asegura que es importante consultar al especialista cuando alguno de los síntomas interrumpe continuamente la vida cotidiana.

“Diferentes tipos de profesionales de la atención médica pueden diagnosticar y supervisar el tratamiento del trastorno por déficit de atención e hiperactividad. Busca un profesional que esté capacitado y tenga experiencia en atender a adultos con trastorno por déficit de atención e hiperactividad”, explicó.

Cinco recomendaciones para tener una buena salud mental en el trabajo

Durante la pandemia de covid-19, la depresión y ansiedad aumentaron más de 25 %, y según la Organización Mundial de la Salud (OMS), de sus 194 estados miembro, solo la mitad cuenta con estrategias, políticas o planes de prevención que están en resonancia con los instrumentos internacionales y de derechos humanos.

Solo en Colombia, según la encuesta Pulso Social del DANE, el 1 % de las personas consultó a un psicólogo durante la pandemia. De hecho, se confirmó que el 95 % de los ciudadanos con depresión desistió ir a donde un especialista por la demora en las citas: tardaban entre tres y cuatro meses.

Colombia y México son los países que, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), tienen el menor equilibrio entre la vida personal y el trabajo. Entre el 60 y el 80 % de los accidentes laborales y el 80 % de las visitas al médico se deben al estrés.

Con estas preocupantes cifras de frente, y en un momento de crisis, Momentu, una plataforma que acompaña a las personas de la mano de expertos en salud mental para reducir el estrés laboral, da cinco consejos para tener una buena salud mental en el trabajo:

  • Abrir espacios para conversar sobre la salud mental. Esto reducirá el estigma. Las buenas conversaciones muestran una disposición de escuchar y entender al otro y dar soluciones a los problemas, demostrando la transformación y el cambio que todos desean hacia un lugar mejor para trabajar.
  • Promover estilos de vida saludables y equilibrio entre la vida personal y laboral reducirá las posibilidades de contraer una enfermedad coronaria y cardiovascular, además de nivelar los niveles de azúcar y colesterol en la sangre y disminuir la aparición de enfermedades crónicas degenerativas como gastritis y alzhéimer.
  • Ofrecer flexibilidad laboral. Las empresas se están dando cuenta que sus colaboradores son más productivos si les dejan que ellos mismos tengan el propio control sobre su tiempo y sean los que decidan cuándo y dónde trabajar. Dos de cada tres empleados reportaron mayores niveles de productividad trabajando desde casa, debido a menos distracciones.
  • Promover espacios de relajación a través de meditación y yoga. La meditación puede eliminar el estrés del día y brindar paz interior lo que implica a la compañía mejores resultados y un excelente clima organizacional
  • Acompañar a los colaboradores con sesiones de terapia y coaching. El coaching es una práctica profesional que permite desarrollar el potencial de la persona en función de su proyecto. De este modo, el proceso terapéutico se convierte en un camino mensurable y eso es lo que lo transforma en una terapia distinta, estimulante ayudando a enfrentar y resolver conflictos a través de distintas herramientas. De esa forma, influye en la mejora de la convivencia debido a la superación de obstáculos y, como consecuencia, se obtiene una convivencia más satisfactoria.