Para bajar de peso no solo basta con cambiar un plan de alimentación, sino que también es necesario llevar a cabo una rutina física, que de acuerdo con los National Institutes Health (NIH) es indispensable para mantener un peso adecuado, ya que en la actualidad existe un número de dietas que prometen rápidamente adelgazar, pero sin prestar atención, pueden ser contraproducentes, porque según la organización, se podría dejar de recibir nutrientes importantes para el cuerpo.
“Algunas dietas de moda también limitan en gran medida las calorías para conseguir una pérdida rápida de peso. En algunos casos, estas dietas no son seguras. En la mayoría de los casos, estas dietas no son sostenibles lo suficiente como para lograr una pérdida de peso a largo plazo”, agrega la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos (MedlinePlus) en uno de sus informes.
De ahí que es importante conocer las propiedades de cada alimento, previo a su consumo, para incluirlo -si es posible- a una dieta balanceada, y así, aprovechar sus beneficios.
MedlinePlus explica que, según la condición de cada persona, así será su dieta, por ejemplo, existe “la de muy pocas calorías” donde en el día se pueden consumir hasta máximo 800 para así bajar hasta 5 libras a la semana; contrario a ella, se encuentra el ayuno intermitente que por algunas horas en el día se debe restringir la ingesta de alimentos.
A pesar de que se puedan describir otros planes de alimentación, ciertamente es importante consultar con un profesional de la salud, quien ayudará a modificar otros hábitos en el estilo de vida, como hacer ejercicio, todo para mantener un peso adecuado, y así, eliminar grasa acumulada.
Ejercicio y la grasa acumulada
La Clínica Mayo explica que según “el ritmo” en el cual el cuerpo se demore en descomponer los alimentos, esto tendría una relación con el peso corporal, pero asegura que el metabolismo no es una causa de sobrepeso.
“Si bien el metabolismo sí ayuda a decidir cuánta energía necesita el cuerpo, el peso depende de cuánto come y bebe una persona en combinación con la actividad física”, menciona en un informe de su página oficial.
Por eso, es importante llevar a cabo actividades físicas que inclusive suelen estar relacionadas no solo con ejercicio, sino con otros momentos en el día, es decir, donde el cuerpo está constantemente en movimiento, como ir al supermercado a comprar algún producto.
La Clínica explica que a esto se le llama “termogénesis por actividad sin ejercicio”, que en algunos casos representa una quema de hasta 800 calorías en el día. Por consiguiente, caminar, al ser un ejercicio aeróbico puede ser útil para combatir la grasa acumulada.
Caminar
Un estudio de la Universidad de Cambridge, publicado en British Journal of Sports Medicine, concluye que por lo menos 11 minutos diarios de rutina física tienen la capacidad de reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Los expertos, a través de un metanálisis -196 artículos de por lo menos 30 millones de personas- con variables como enfermedades crónicas, determinaron el tiempo que una persona podría hacer ejercicio, y así, reducir el riesgo de muerte.
Incluso la investigación corrobora lo dicho por la Clínica Mayo, asegurando que quienes demostraron tener un récord de por lo menos 75 minutos de ejercicio en la semana con una intensidad significativa, lograron disminuir hasta el 23 % del riesgo de muerte prematura.
No solo esto, otro artículo titulado “Efectos de 10.000 pasos al día sobre la salud física y mental en participantes con sobrepeso en un entorno comunitario: un estudio preliminar”, liderado por Kornanong Yuenyongchaiwat, publciado en Brazilian Journal of Physical Therapy (BJPT) concluye que caminar 10.000 pasos por 12 semanas no solo mejora su salud mental de una persona, sino que puede incidir en el estado físico de personas con sobrepeso.
De ahí que el portal The Objective señale que caminar de manera rápida por intervalos de tiempo puede ser ideal para perder peso y eliminar grasa acumulada en el abdomen, incluso si se acompaña de algún chaleco pesado.
Además, explica que hasta 1000 calorías se pueden quemar en un recorrido de 16 km, siempre y cuando, se avance 13 minutos por kilómetro.