De acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, para que la caminata habitual se convierta en un ejercicio que mejore el estado físico, se debe adoptar una buena postura y movimientos decididos como, por ejemplo:
- La cabeza en alto. Hay que mirar hacia adelante, no hacia abajo.
- El cuello, la espalda y los hombros deben estar relajados, y no levantados y tensionados.
- Se deben balancear los brazos libremente, con una ligera flexión de los codos y se puede hacer un poco de envión con los brazos.
- Se deben apretar ligeramente los músculos del estómago, con la espalda recta, no arqueada hacia delante o hacia atrás.
- Se debe caminar de manera fluida, apoyando el talón y luego los dedos.
Adicional, es importante elegir un buen calzado y la recomendación es elegir un calzado con una plantilla ortopédica adecuada, un tacón firme y suelas gruesas y flexibles para amortiguar los pies y absorber los impactos.
Respecto al tiempo, la entidad señaló que se puede comenzar con cinco minutos al día la primera semana y luego aumentar el tiempo cinco minutos cada semana hasta llegar por lo menos a 30 minutos.
Ahora bien, para obtener incluso más beneficios para la salud, hay que intentar hacer al menos 60 minutos de actividad física la mayoría de los días de la semana y si el objetivo es perder peso, el portal Movida Sana reveló que para obtener los beneficios hay que caminar a una velocidad que oscile entre los 4,8 Km/h y los 6,4 Km/h.
No obstante, las personas se preguntan cuál es la mejor hora para hacer ejercicio y, por tal razón, los expertos aseguran que es una cuestión de preferencia, gusto y horarios. Lo importante es cumplir con los objetivos diarios.
Entre tanto, los Institutos Nacionales de Salud (NIH por sus siglas en inglés) explicaron que caminar de manera regular puede tener muchos beneficios para la salud, pues puede reducir el riesgo de desarrollar presión arterial alta, diabetes y enfermedades cardíacas.
Asimismo, puede fortalecer los huesos y músculos, pero adicional, puede ayudar a mantener un peso saludable, y también puede ayudar a mejorar el estado de ánimo.
“Para que las caminatas sean divertidas, vaya a lugares que disfrute, como el centro comercial o el parque. Lleve con usted a alguien con quién conversar o escuche un poco de su música preferida (pero mantenga el volumen lo suficientemente bajo como para oír los sonidos a su alrededor)”, señalaron los NIH.
Por su parte, toda actividad física debe estar acompañada de una buena alimentación y según el Ministerio de Salud, para lograrlo, es necesario el consumo diario de frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, leche, carnes, aves y pescado y aceite vegetal en cantidades adecuadas y variadas.
Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) puntualizó que una dieta balanceada es la que incluye al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día; menos del 10 % de la ingesta calórica total debe ser de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria debe proceder de grasas y se deben consumir menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.
De igual forma, es importante beber agua, ya que este líquido acelera el metabolismo, genera saciedad y adicional hidrata el cuerpo. No obstante, según la entidad sin ánimo de lucro, el consumo diario de agua es diferente para los hombres y para las mujeres, porque existen diferencias entre la ingesta, pero por lo general los hombres deberían consumir 3,7 litros de agua al día y las mujeres deberían beber 2,7 litros.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.