Durante la etapa de la vejez es cuando más se diagnostican diversos padecimientos, esto como resultado de que el cuerpo ya no está en las mismas condiciones ni con la misma vitalidad; pese a esto, varios padecimientos que solían ser frecuentes en pacientes de avanzada edad ahora están siendo diagnosticados en personas jóvenes, debido al incremento del sedentarismo y de una precaria alimentación.

Las articulaciones se suelen desgastar con frecuencia como resultado del paso de los años y más en pacientes que a lo largo de su vida poco o nada llevaron actividad física. Cabe mencionar que los dolores en las articulaciones suelen ser más frecuentes en personas con sobrepeso u obesidad, ya que la zona necesita soportar un peso adicional para el que no está diseñado, generando presión sobre dicha articulación, haciendo que se inflame o duela.

Una de las zonas que más tiende a doler es la parte que permite la movilidad en las rodillas, un síntoma frecuente en pacientes en edad avanzada o en jóvenes, sobre todo luego de haber padecido de una lesión o cuando están en algún tipo de proceso de crecimiento. Cuando el dolor suele aumentar de agudeza y se prolonga por determinado tiempo, es crucial consultar con un profesional de la salud.

El portal Doctor José Félix menciona que carecer de algún tipo de vitamina o nutriente puede generar intensos dolores en determinadas partes del cuerpo, incluidas las rodillas.

La mayoría de los nutrientes son absorbidos por el organismo, cuando se ingieren cierto tipo de alimentos, ya que algunos compuestos son producidos de manera natural por el cuerpo, pero otros se obtienen por medio de lo que un paciente consume a diario, razón por la que es fundamental que una persona se alimente de manera sana y equilibrada.

Los cartílagos de la rodillas son tejidos firmes y flexibles que protegen los extremos de los huesos en las diferentes articulaciones. | Foto: Jan-Otto

Vitaminas para reducir el dolor en las articulaciones

Cuando el dolor que surge en la rodilla es leve se puede mejorar con algunos ejercicios o empleando una rodillera ortopédica que recubra la zona. En algunos casos se requerirá reposo si se sobrecarga la articulación; pese a lo anterior, siempre es crucial contar con el apoyo y la asesoría de un profesional en el tema.

  • Complejo B: estos nutrientes se subdividen, es decir, hay varios tipos de vitamina B que son cruciales para el buen funcionamiento de las articulaciones y de toda la parte ósea del cuerpo. Para poder adquirirlas se pueden ingerir ciertos suplementos o cápsulas o inclusive inyecciones cargadas de este nutriente; pese a lo anterior, es fundamental consultar con un profesional de la salud para validar si se pueden obtener por dicha vía y en qué cantidades o con qué frecuencia.
El complejo B es vital para el buen funcionamiento del organismo. | Foto: Libre de derechos
  • Vitamina K: gracias a este nutriente, la sangre logra coagularse como es debido. Además, promueve la buena salud de las articulaciones de los huesos en general, debido a que cuenta con propiedades que reducen de manera directa la inflamación.
Parte de la vitamina K la sintetizan ciertas bacterias en el intestino. | Foto: Getty Images