Normalmente, con el paso del tiempo, los niveles de presión arterial se van alterando debido a otras afecciones que suelen aparecer con los años.
Cuando la presión arterial alta se presenta en el organismo, esta se conoce como hipertensión, una afección frecuente en la que la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias con el transcurso del tiempo es tan alta que puede causar problemas de salud, como una enfermedad cardíaca.
La hipertensión arterial está determinada tanto por la cantidad de sangre que el corazón bombea como por el grado de resistencia al flujo de la sangre en las arterias. De hecho, cuanta más sangre bombea el corazón y más estrechas estén las arterias, mayor será la presión arterial.
Así las cosas, la entidad de salud Sanitas detalla que esta afección se puede dar por múltiples causas, entre ellas, una dieta alta en sal, un desbalance hormonal, alteraciones en el sistema nervioso, circulatorio, renal o metabólico. De igual forma, el estrés y las emociones fuertes pueden generar una subida momentánea de la presión arterial.
Para controlar este problema de salud, es fundamental acudir al médico para determinar la gravedad de la enfermedad y el tratamiento a seguir, que básicamente depende del consumo de medicamentos formulados por un profesional en salud, una dieta rica en vitaminas y minerales, y una buena rutina de ejercicio físico.
Con respecto al consumo de frutas, el portal web Cocina Vital destaca las propiedades del durazno, una fruta que contiene grandes cantidades de vitaminas y minerales, lo cual no solo favorece la salud de las arterias, sino que ayuda a reforzar las defensas del sistema inmunológico.
Entre sus compuestos nutricionales, el durazno contiene potasio, un mineral que ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo y contribuye a controlar la presión arterial.
En cuanto al fortalecimiento del sistema inmune, este fruto dulce contiene una extraordinaria fuente de hierro, que es ideal para agregarse en la dieta de personas que padecen anemia, una afección que se caracteriza por disminuir las defensas del organismo.
Asimismo, al ser una fruta con el 87 % de su composición en agua, evita la deshidratación y hace que la digestión sea más rápida, lo que favorece la disminución del peso. A su vez, esto ayuda a prevenir enfermedades respiratorias, gracias a su alto contenido de vitamina C y favorece la cicatrización de las heridas.
Otros beneficios del durazno
Otro beneficio que otorga el durazno es que mejora la circulación y ayuda a los músculos del corazón a fortalecerse estimulando el flujo sanguíneo de todo el cuerpo. Asimismo, al ser rico en betacaroteno, este superalimento optimiza la función visual, porque mejora la circulación de la sangre de los ojos y en los músculos que los rodea.
A su vez, fortalece los huesos, que con el paso de los años se van debilitando hasta provocar afecciones como la osteoporosis, por lo que es recomendable consumir durazno, ya que contiene fósforo, un nutriente ideal para reforzar la salud de los dientes.
Por otra parte, el color del durazno indica que esta fruta es fuente de carotenos, responsables de su pigmentación amarilla, naranja y roja. Existen más de 600, entre los cuales algunos tienen funciones protectoras de la salud ocular, entre ellas la luteína y la zeaxantina, que forman parte de la mácula lútea y el cristalino que ayudan a mejorar la salud visual.
“Como apuntan las autoras Carr y Maggini en una publicación de Nutrients, esta ejerce diferentes roles en las células del sistema inmune, que resultan positivas para los humanos. Asimismo, destacan que un déficit de ácido ascórbico implica una mayor susceptibilidad a sufrir infecciones”, asegura Mejor con Salud.