Tener una buena digestión es importante para sentirse bien. En este proceso el cuerpo descompone los alimentos en sustancias que utiliza como energía y que son útiles para el crecimiento y la reparación de los tejidos.

El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales, de Estados Unidos, indica que esta es importante porque el organismo necesita los nutrientes provenientes de los alimentos y bebidas para funcionar correctamente y mantenerse sano.

Según el instituto Mayo Clinic, el tiempo de digestión varía entre los individuos y entre hombres y mujeres. Después de comer, los alimentos tardan aproximadamente de seis a ocho horas en pasar por el estómago y el intestino delgado. Luego entran en el intestino grueso (colon) para una mayor digestión, absorción de agua y, finalmente, la eliminación de los alimentos no digeridos.

En ocasiones ese proceso no se realiza de manera adecuada y las personas pueden sentir pesadez, gases y otras molestias. Los remedios caseros son una buena alternativa para aliviar problemas digestivos y existen algunas plantas a las que se les atribuyen propiedades beneficiosas. Estas son 10 de ellas.

1. Manzanilla: Esta hierba contribuye a que no se acumulen gases en el estómago y alivia la pesadez abdominal. Dado que es suave, es utilizada para aliviar las molestias en bebés y niños. Se puede consumir en infusión y se utilizan tanto sus flores como las hojas.

2. Melisa: Se dice que aporta virtudes sedantes digestivas, antiespasmódicas, y antimicrobianas. El portal Saber Vivir, de España, asegura que las hojas de melisa mejoran los trastornos propios de la dispepsia, que provoca digestiones lentas.

3. Hinojo: Esta planta es un buen tónico para la digestión, gracias a que incrementa las secreciones gastrointestinales. También se dice que es carminativa porque reduce la producción de gases y estimula los movimientos naturales del intestino.

4. Menta: Ayuda a aliviar tanto las náuseas como los síntomas del síndrome de colon irritable. Se necesitan tres hojas de menta y una taza de agua. Se pone a hervir y cuando llegue a punto de ebullición se agregan las hojas y se dejan durante dos minutos, luego se apaga el fuego, se deja reposar, se cuela y se toma tibia, precisa un artículo de la revista Mejor con Salud.

5. Alcachofa: Aumenta la expulsión y fluidez de la bilis, facilitando la descomposición de las grasas, dice Saber Vivir. Por ello se recomienda para tratar las digestiones lentas que provocan pesadez, distensión abdominal y flatulencias. No se debe consumir si la persona sufre de piedras biliares, como tampoco en el embarazo y la lactancia.

6. Poleo: Cuerpo Mente asegura que la infusión de esta planta es favorable después de una comida pesada, gracias a que es digestivo, antiespasmódico, carminativo y antiséptico.

7. Ragaliz: La raíz de regaliz se consume desde hace millones de años. Es ideal para evitar el retorno del sabor de los alimentos tras haber comido y para combatir las náuseas y el malestar general.

8. Jengibre: Información del portal Hogarmanía asegura que este alimento actúa como espasmódico y antiemético. “Puede utilizarse para aliviar los síntomas de la flatulencia, cólicos, naúseas, vómitos e intestino irritable. Es antiinflamatorio y antiséptico, por lo que es beneficioso en las infecciones gastrointestinales”, precisa este sitio web.

9. Malvavisco: Calma la inflamación de todo el tracto digestivo. Combinar con manzanilla y tomar en infusión resulta favorable para los síntomas de la acidez, malestar y la irritación de la boca del estómago. Con esta planta no solo se alivian los síntomas derivados de la alimentación, sino que también ayuda en la limpieza del aparato digestivo.

10. Boldo: La infusión de esta planta previene la pesadez de estómago, protege el hígado y estimula la vesícula biliar. También facilita la digestión de las grasas y previene la formación de cálculos biliares. Tiene, además, un efecto diurético, por lo que ayuda a eliminar líquidos y depurar el cuerpo de toxinas.