La exfoliación ayuda a acelerar el proceso de renovación celular, estimula la circulación sanguínea y mejora la textura y luminosidad de la piel. Además, permite una mejor absorción de los productos de cuidado facial y favorece la efectividad de tratamientos posteriores, como las mascarillas y los sueros.
La frecuencia con la que debe exfoliar su rostro dependerá en gran medida del tipo de piel. La piel seca, por ejemplo, tiende a ser más delicada y sensible, por lo que requiere productos y tratamientos suaves.
Este tratamiento contribuye a retener la humedad y a controlar condiciones como el acné. No obstante, cuando se realiza de forma inadecuada o excesiva, ocurre todo lo contrario: la piel pierde células en exceso y se afecta la barrera natural.
Estas son las cinco señales que manifiesta el rostro al exfoliarse continuamente la piel:
- Enrojecimiento. Cuando se realiza exfoliación, siempre se presenta enrojecimiento de la piel, debido a la fricción con el producto que esté usando. No obstante, este enrojecimiento suele irse pronto.
Si no es así, y presenta una sensación de picazón o ardor, entonces se habla de una sobreexfoliación. Ahora, si disminuyó las veces que exfolia la piel y los síntomas siguen, es importante evaluar el producto que se aplica porque debe ser compatible al tipo de piel.
- Hipersensibilidad e inflamación. Esta es más evidente cuando intenta aplicar otros productos. La piel se inflama a causa de la afectación de la barrera natural por la fricción. De acuerdo a un artículo publicado en la Revista Dermatología Venezuela, el eccema de contacto irritativo que aparece se debe también a una alta pérdida transdérmica de agua.
- Sequedad y descamación. La piel seca o xerosis es uno de los síntomas en el que el cutis indica que se encuentra deshidratado, expertos indican que es más común en las mujeres. Cuando se exfolia la piel en exceso, se pierde la facultad que tiene de retener adecuadamente el agua, lo que da paso a este síntoma.
Cabe aclarar que, cuando se exfolia la piel en exceso, se pierde la facultad que tiene de retener adecuadamente el agua, lo que da paso a este síntoma. Sin embargo, en el caso de la piel seca lo que causa es parches de descamación, es decir, está en riesgo de agravar la condición de base.
- Acné y brotes. Cuando exfolia con frecuencia se ve el empeoramiento del acné.
La barrera cutánea dañada no puede actuar contra el sobrecrecimiento bacteriano. Por ende, las bacterias colonizan más y más. Asimismo, la fricción del exfoliado podría llevar a los microorganismos de un sitio a otro.
- Exceso de grasa y brillo. Se puede presentar en forma de brillo excesivo. Esto pasa, cuando la piel pierde sus aceites naturales por la exfoliación y debe actuar para compensar el desequilibrio. Entonces, produce mayor cantidad de grasa.
Así puede revertir los efectos de una sobreexfoliación
- Humecte bien tu piel para ayudarla a recuperarse más rápido.
- Detenga la práctica del exfoliado hasta recuperar completamente su piel.
- Use aceites faciales que se asemejen a los aceites naturales del cutis, en caso de sufrir sequedad.
- Aplique productos cosméticos con péptidos para estimular la producción de colágeno y disminuir la inflamación.