La enfermedad cardiovascular es un término amplio para problemas del corazón y los vasos sanguíneos que, a menudo, se deben a la aterosclerosis. Esta afección ocurre cuando la grasa y el colesterol se acumulan en las paredes del vaso sanguíneo (arteria), lo que también se conoce como placa.
Con el tiempo, la placa puede estrechar los vasos sanguíneos y causar problemas en todo el cuerpo. Si una arteria resulta obstruida, esto puede llevar a que se presente un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular, así lo aseguró el portal web Medlineplus.
Una dieta sana y equilibrada, la practica de actividad física con frecuencia pueden ayudar a disminuir los riesgos de padecer enfermedades cardiovasculares. A continuación, se mencionarán algunas plantas que ayudan a mejorar la circulación, según el portal web Hogar Manía. Cabe mencionar que antes de ingerir alguna de estas bebidas se debe consultar con el médico tratante o especialista en el tema.
- Ortiga: la infusión de esta planta es un excelente suplemento de hierro para aquellas personas que padecen de anemia. Si se combina con ortiga, espino y melisa, ayudará a regular la hipertensión. Si se mezcla con agripalma y coronilla real, se obtiene un remedio tradicional para disminuir la vena varice.
- Jengibre: este ayuda a la circulación, ya que sirve como vasodilatador, ejerciendo una acción anticolesterol. Se puede disolver jengibre en polvo en un vaso con agua caliente, también se puede tomar en cápsulas o rallando jengibre para hacer una aromática.
- Espino: es utilizado tradicionalmente para reconstruir el corazón y para la circulación. El espino ayuda a regular la frecuencia cardíaca y la hipertensión. Se puede tomar en infusión, tintura y zumo.
- Aquilea: se puede combinar con melisa y espino en infusiones. La aquilea reduce la hipertensión y trata la arteriosclerosis.
- Flores de tilo: estás ayudan a reducir el estrés y tensión asociadas a la hipertensión. Se utiliza para favorecer las arterias y aliviar los dolores intensos de cabeza.
- Ajo: evita el aumento de colesterol y tiene una acción anticoagulante beneficiosa para tratar la trombosis y la arterioesclerosis. También se usa para tratar resfriados e infecciones respiratorias. Se puede ingerir en cápsulas, en jugo o en comidas.
- Romero: es utilizado tradicionalmente para fortalece el corazón, reducir las varices y prevenir arteriosclerosis. Se puede combinar con melisa en infusión, para evitar los dolores de cabeza derivados de la hipertensión.
- Ginkgo: estimula la circulación. Se combina con aquilea, habitualmente, para tratar las varices. Se puede combinar con jengibre para tratar el frío de las articulaciones.
- Goji: se cree que este tónico chino ayuda a tener una vida más larga. Sus bayas, ingredientes estrella en Occidente, son esenciales para el sistema circulatorio y la sangre.
- Hamamelis: esta planta es astringente y antiinflamatoria, lo que la convierte en uno de los remedios estrella para mejorar la circulación de la sangre.
Varices, el problema circulatorio por excelencia
Las venas varicosas son venas hinchadas y retorcidas que pueden verse justo debajo de la piel. Por lo general ocurren en las piernas, pero también se pueden formar en otras partes del cuerpo. Las hemorroides son un tipo de vena varicosa.
Sus venas tienen válvulas que ayudan a mantener la sangre fluyendo en una sola dirección hacia el corazón. Si las válvulas están débiles o dañadas, la sangre puede detenerse y acumularse en las venas. Esto hace que las venas se hinchen, lo que puede ocasionar venas varicosas.
Las várices son muy comunes. Se tiene un mayor riesgo de padecerlas, si se es mujer, si se tiene obesidad, si no se practica actividad física o si tiene antecedentes familiares de venas varicosas. También pueden ser más comunes durante el embarazo, así lo aseguró el portal web Medlineplus.