La insulina es la hormona que permite que el azúcar en la sangre pase a las células, ya que es la principal fuente de energía del cuerpo humano. Es importante para regular y mantener niveles normales de glucosa, porque si son demasiado bajos o altos pueden causar complicaciones.

Algunas personas pueden presentar resistencia a la insulina. Esto ocurre cuando las células de los músculos, grasa e hígado no responden bien a esta hormona y no pueden absorber el azúcar de manera fácil.

“Es posible revertir la resistencia a la insulina y prevenir la diabetes tipo 2 con cambios en el estilo de vida, medicamentos o ambos en algunos casos. Los cuerpos saludables presentan diferentes formas y tamaños. Bajar de peso con métodos drásticos puede ser peligroso y contraproducente. En su lugar, consulta a un médico o nutricionista sobre la manera de incorporar alimentos saludables, como frutas, verduras, frutos secos, legumbres y proteínas magras, a tus comidas. También considera incorporar el ejercicio y el movimiento a tu rutina diaria de una forma que te haga sentir bien”, detallan los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada la práctica clínica, la educación y la investigación.

La ingesta de una alimentación saludables es clave para mantener una buena salud. | Foto: Getty Images

El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales señala que existen diferentes factores que incrementan el riesgo de padecer resistencia a la insulina. Uno de ellos es el antecedente familiar, pues si los padres tienen esta afección, puede que otro miembro lo padezca también.

Asimismo, hay otros factores de riesgo. Estos son:

  • Sobrepeso u obesidad
  • Tener 45 años o más.
  • Pertenecer a uno de los siguientes grupos étnicos: afroamericano, nativo de Alaska, indio americano, asiático americano, hispano/latino, nativo de Hawái o americano de las islas del Pacífico.
  • No ejercitarse regularmente.
  • Tener hipertensión o colesterol elevado.
  • Tener historial de diabetes gestacional.
  • Haber tenido afecciones cardíacas o accidentes cerebrovasculares.
  • Tener síndrome de ovario poliquístico.
  • Tener síndrome metabólico.
  • Tomar algunos medicamentos, como los glucocorticoides, algunos antipsicóticos y algunos medicamentos para el VIH.
  • Tener trastornos hormonales, como el síndrome de Cushing y la acromegalia.
  • Problemas de sueño, especialmente la apnea del sueño.
Ser obeso incrementa el riesgo de muchas afecciones de salud, incluyendo resistencia a la insulina y diabetes. | Foto: Peter Dazeley

¿Cuándo es importante hacerse una prueba de insulina?

Los expertos de Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Estados Unidos recomienda realizar una prueba de insulina en la sangre en caso de presentar síntomas de niveles bajos de azúcar en la sangre, los cuales son:

  • Sudor
  • Temblores
  • Latidos irregulares del corazón
  • Confusión
  • Mareos
  • Visión borrosa
  • Hambre extrema

Diabetes

En los pacientes diabéticos, su cuerpo no produce una cantidad suficiente de insulina o no puede usar adecuadamente la insulina que produce. Cuando no hay suficiente insulina o las células dejan de responder de forma positiva a la insulina, hay demasiada azúcar en el torrente sanguíneo y, con el tiempo, esto puede causar problemas de salud graves, como enfermedad del corazón, pérdida de la visión y enfermedad de los riñones.

Existen tres tipos de diabetes:

  • Diabetes tipo 1: este tipo de diabetes es la menos común. Se puede presentar en cualquier edad, pero la suelen padecer, por lo general, niños, adolescentes o adultos jóvenes. Se caracteriza por una producción deficiente de insulina, el cuerpo no produce o produce en cantidades mínimas. Para esta diabetes se requiere de inyecciones diarias de insulina (la hormona que transporta la glucosa) . Aún no se conoce la causa médica de esta enfermedad y tampoco se puede prevenir, debido al poco conocimiento que se tiene sobre ella. Algunos de los síntomas de este tipo de diabetes es hambre constante, pérdida de peso, trastornos de la visión , excreción excesiva de la orina y fatiga.
  • Diabetes tipo 2: este tipo de diabetes es el más común. Por lo general se presenta en la edad adulta (sobrepeso), sin embargo, en la actualidad se presenta cada vez más en los niños. En esta enfermedad el cuerpo es resistente a la insulina y no usa como debería. Aunque se diagnostica en adultos con obesidad, no todas las personas con diabetes tipo 2 son obesas. Esta enfermedad tiene síntomas similares a los de la diabetes tipo 1, pero se presentan de forma silenciosa. En algunos casos, las personas no saben que tienen diabetes de este tipo y se les diagnostica mucho tiempo después, lo que aumenta los riesgos y las complicaciones en el organismo.
  • Diabetes gestacional: este tipo de diabetes aparece en el embarazo. Esta enfermedad aumenta el riesgo de que se presenten complicaciones en parto. Al mismo tiempo de que la madre y el hijo presenten diabetes de tipo 2 en un futuro.
Los altos niveles de azúcar en la sangre pueden ser un riesgo para la salud. | Foto: Getty Images/iStockphoto