Los arándanos azules son frutas comestibles de la planta Vaccinium angustifolium y tienen un alto contenido de fibra, lo que puede ayudar con la digestión normal, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

La entidad señala, además, que también contienen vitamina C, otros antioxidantes y sustancias químicas que pueden reducir la inflamación y destruir las células cancerosas.

Sobre la misma línea, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que el consumo de arándanos tiene varios beneficios para el cuerpo, como, por ejemplo:

1. Reducir el colesterol, ya que son ricos en antioxidantes “los cuales ayudan a reducir los niveles de colesterol LDL, llamado “malo” y triglicéridos en la sangre” y se previenen enfermedades cardiovasculares.

Los arándanos azules se consumen comúnmente en los alimentos. | Foto: Getty Images

2. Regular la presión arterial, porque contienen “antocianinas, fitoquímicos con propiedades antioxidantes y antihipertensivas que actúan mejorando la función del endotelio, células que recubren la superficie interior de los vasos sanguíneos”.

3. Prevenir el cáncer gracias a los antioxidantes que posee.

4. Mejorar la capacidad cognitiva, ya que aportan antioxidantes y propiedades antiinflamatorias que aumentan la capacidad de la memoria y retrasan el envejecimiento mental.

5. Controlar la diabetes por los “compuestos bioactivos con propiedades antidiabéticas que ayudan a disminuir los niveles de glucosa en el organismo y a mejorar la sensibilidad a la insulina”.

Las hojas de arándanos también tienen nutrientes. | Foto: Getty Images

6. Prevenir infecciones urinarias, porque contiene compuestos llamados proantocianidinas que impiden que las bacterias Escherichia Coli se adhieran a las paredes del tracto urinario.

7. Ayudar a disminuir el peso corporal al ser ricos en fibra y agua, lo cual genera saciedad y se disminuye el consumo de alimentos. “Además de eso, los arándanos contienen compuestos antioxidantes que ayudan a aumentar la sensibilidad a la insulina, disminuyendo la acumulación de grasas en el organismo, siendo una buena fruta para incorporar en las dietas para adelgazar”.

8. Beneficiar la microbiota intestinal, pues sus componentes ayudan al crecimiento de bacterias buenas como lactobacillus y las bifidobacterias. “Estas bacterias ayudan a mejorar el sistema inmunitario y a regular el funcionamiento intestinal, siendo una excelente opción para las personas con estreñimiento”.

9. Proteger el hígado por sus compuestos antioxidantes y antiinflamatorios que ayudan a disminuir la acumulación de grasa en el hígado.

10. Ayuda a la recuperación muscular debido a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

Información nutricional por 100 gramos de arándanos

  • Energía: 64 kcal
  • Agua: 84,2 g
  • Proteínas: 0,74 g
  • Grasas: 0,31 g
  • Carbohidratos: 14,6 g
  • Fibra: 2,4 g
  • Magnesio: 6 mg
  • Fósforo: 13 mg
  • Potasio: 86 mg
  • Vitamina C: 8,1 mg
  • Vitamina K: 19,3 mg
  • Antocianinas: de 201,4 a 402,8 mg
Los arándanos pueden ayudar a bajar los niveles de colesterol alto. | Foto: Getty

Respecto al consumo, el portal portugués indicó que “esta fruta puede consumirse entera, en jugo, adicionada al yogur o se puede utilizar para preparar pasteles y panqueques o para prepararse un té con sus hojas o el fruto”.

Además, agregó que “también esta fruta se puede encontrar como suplemento en polvo y puede adquirirse en tiendas de productos naturales, online o en algunas farmacias”.

De hecho, reveló que para preparar el jugo se deben licuar una taza de arándanos azules; una taza de agua; unas hojas de menta y unas gotas de limón.

Asimismo, publicó una receta para hacer té y solo se debe hervir una taza de agua, agregar de una a dos cucharadas de bayas secas. Después, se deja reposar por diez minutos y se consume.

De todos modos, antes de consumir algún alimento, lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.