Antes de decidir qué tipo de alcohol consumir, es importante comprender los riesgos asociados con el consumo de alcohol en personas con diabetes y cómo hacerlo de manera segura. ¿Cuál es el mejor tipo de alcohol para beber si tiene diabetes? Y, ¿cuánto puede beber? Acá le contamos.
En términos de cantidad, se recomienda moderación. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), las mujeres con diabetes no deben consumir más de una porción de alcohol al día, mientras que los hombres con diabetes no deben consumir más de dos porciones al día. Una porción típica de alcohol equivale a 12 onzas de cerveza, 5 onzas de vino y 1,5 onzas de licores destilados.
Al elegir qué tipo de alcohol beber, es importante tener en cuenta cómo afectará a su cuerpo si tiene diabetes. Diferentes bebidas pueden tener un impacto muy diferente en su organismo. Esto se debe a dos factores en competencia. Por un lado, el alcohol en sí inhibe la liberación constante de glucosa del hígado, lo que puede resultar en niveles bajos de glucosa en sangre. Por otro lado, el azúcar y los carbohidratos presentes en muchas bebidas pueden causar niveles altos de glucosa en sangre. Por lo tanto, es fundamental vigilar continuamente los niveles de glucosa en sangre y ser consciente de los contenidos de las bebidas que se están consumiendo.
En cuanto a la cerveza, es una opción popular tanto en situaciones sociales como en momentos de relajación personal. Sin embargo, se debe tener en cuenta el contenido de carbohidratos al beber cerveza con diabetes tipo 1. Una cerveza light contiene entre 3 y 6 gramos de carbohidratos por porción, mientras que una cerveza regular puede tener entre 10 y 15 gramos de carbohidratos. Además, es importante considerar que muchas personas no consumen solo una lata de cerveza, y el contenido de alcohol de la cerveza oscila entre el 4 % y el 7 %.
El vino es otra opción popular. El contenido de alcohol del vino generalmente varía entre el 12 % y el 15 %, y una porción típica equivale a 5 onzas. Al igual que con la cerveza, es importante considerar el contenido de carbohidratos, que puede variar ampliamente entre diferentes tipos de vino. La mayoría de los vinos tintos contienen menos de 5 gramos de carbohidratos por porción, pero las variedades de vino de postre pueden tener hasta 14 gramos de carbohidratos por porción.
Las bebidas mezcladas pueden resultar complicadas de controlar, lo cual es especialmente importante cuando se tiene diabetes. Esto se debe a que la cantidad de alcohol y carbohidratos puede variar significativamente entre diferentes mezcladores y tipos de alcohol. Por ejemplo, una porción típica de ron con Coca Cola dietética contiene solo 2 gramos de carbohidratos, mientras que una mezcla con Coca Cola regular puede tener 26 gramos de carbohidratos. Así las cosas, es esencial conocer el contenido de la bebida que se está consumiendo para poder realizar los ajustes necesarios.
En cuanto a las bebidas destiladas, tienen la ventaja de tener un conteo de carbohidratos generalmente bajo. Sin embargo, su alto contenido de alcohol puede aumentar la susceptibilidad al consumo excesivo y a los efectos secundarios negativos del alcohol en personas con diabetes. Además, si se consume licor, es importante asegurarse de beber agua u otros líquidos para evitar la deshidratación, que puede afectar los niveles de glucosa en sangre.
Si tiene diabetes y planeas beber alcohol, es esencial hacerlo con moderación y comprender cómo diferentes tipos de alcohol pueden afectar a su organismo. Debe monitorizar sus niveles de glucosa en sangre y tener en cuenta el contenido de carbohidratos de las bebidas que elija.