El envejecimiento es un proceso biológico y natural. La Organización Mundial de la Salud (OMS) lo define como el resultado de la acumulación de una gran variedad de daños moleculares y celulares a lo largo del tiempo, lo que lleva a un descenso gradual de las capacidades físicas y mentales y a un mayor riesgo de enfermedad.

Las señales más visibles son las que se manifiestan en la piel, con la aparición líneas de expresión y arrugas, proceso que inicia alrededor de los 40 años. Estos signos de edad son consecuencia de la disminución hormonal que afecta a las células de la piel e incide en la producción de colágeno y elastina, precisa una publicación de la revista Muy Saludable, de la compañía Sanitas (España).

Pero si bien el paso de los años generan el envejecimiento, también es consecuencia de factores como malos hábitos de vida, la contaminación, la exposición indebida al sol y el estrés, los cuales no solo afectan la piel, sino el organismo, en general.

La ingesta de frutas debe ser una prioridad en la alimentación diaria. | Foto: Getty Images

Una mala alimentación, los bajos niveles de colágeno en el cuerpo y la falta de descanso, entre otros, aceleran considerablemente este proceso y hacen que sus efectos en el organismo sean más evidentes con el paso de los años.

La ingesta de una alimentación saludable y equilibrada es clave en todas las etapas de la vida, pues es una de las mejores formas de garantizar condiciones de salud favorables cuando los años avanzan. Las frutas y verduras son de los productos que no deben faltar en la ingesta diaria. La OMS recomienda consumir al menos 400 gramos de estos alimentos.

Dentro de la muchas opciones que se tienen para consumir está el anón, también conocido como saramuyo o annona, una fruta rica en antioxidantes, vitaminas y minerales que ayudan a hacerle frente al envejecimiento, combatir la inflamación y aumentar las defensas del organismo, precisa el portal de bienestar y salud Tua Saúde.

Rico en antioxidantes, claves para prevenir el envejecimiento prematuro

Por ser un alimento rico en vitaminas A y C, reconocidas por su poder antioxidante, contribuye a combatir el envejecimiento prematuro. Específicamente, la C promueve la formación de colágeno, una proteína responsable por darle firmeza y elasticidad a la piel, previniendo la formación de arrugas y signos tempranos de la edad como las líneas de expresión.

El anón es rico en antioxidantes que ayudan a proteger las células de los efectos de los radicales libres. | Foto: Getty Images

De igual forma, el anón contiene vitamina B1, conocida como tiamina, un nutriente que es importante porque ayuda a convertir los azúcares en energía con mayor facilidad, por lo que es un aliado para combatir la fatiga, el cansancio y la debilidad del cuerpo, precisa una publicación del portal de estilo de vida unCOMO. Se dice que las personas que tengan anemia pueden beneficiarse del saramuyo, ya que al tener una buena cantidad de hierro ayudará a que se produzcan más glóbulos rojos.

De otra parte, este fruto es rico en fibras, gracias a lo cual su consumo regular favorece el aumento del volumen de las heces y los movimientos intestinales, siendo una buena opción para quienes sufren de estreñimiento. Además, debido a sus propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas, ayudaría a prevenir el surgimiento de úlceras estomacales.

Otra de sus bondades es que tiene un alto contenido en magnesio, por lo que este alimento ayuda a flexibilizar los músculos del corazón, reduciendo el riesgo de infarto e ictus.

El consumo de anón ayuda a controlar los niveles de presión arterial. | Foto: Getty Images / Ariel Skelley

El anón también es rico en potasio, un mineral que contribuye para aumentar el relajamiento de los vasos sanguíneos, permitiendo que la sangre circule con más facilidad, ayudando a disminuir la presión arterial, siendo muy útil en personas que padecen de presión arterial alta.

“Además de eso, los alcaloides y los péptidos, como la ciclosquamosina, presentes en la semilla de la anona, actúan bloqueando los canales de calcio, inhibiendo la liberación de neurotransmisores que son responsables de aumentar la presión”, precisa Tua Saúde. Este fruto puede consumirse fresco o cocido y también puede utilizarse para preparar postres, licuados o tés.