Una de las principales recomendaciones de los nutricionistas y expertos de la salud es tener una alimentación balanceada, en la que las frutas tengan una presencia importante, debido a su gran aporte de vitaminas y nutrientes.

La piña, una fruta que se caracteriza por su sabor entre dulce y ácido, es conocida por ser una excelente fuente de vitamina C y por tener diversos beneficios para el organismo. De acuerdo con el portal Cuerpo Mente, una de las principales bondades de esta fruta es que está compuesta en su mayoría por agua (85 %), por lo que se trata de un alimento bajo en calorías.

Además, contiene otras vitaminas como la A, B1 y ácido fólico, las cuales contribuyen al buen estado de la salud. Igualmente, en su composición resaltan otros nutrientes como el potasio, magnesio y hierro.

Todos estos componentes la hacen una fruta ideal para incluir en la alimentación, ya que tienen varios beneficios, como su acción antidiarréica, debido a que inhibe el crecimiento de los microbios intestinales y mejora los receptores del intestino.

Asimismo, según indica el mencionado portal, la piña es utilizada como un remedio natural para la salud del hígado, puesto que su consumo favorece la circulación de este órgano vital.

A estos beneficios se suman otras propiedades como su acción antiinflamatoria, que la convierte en una fruta recomendada para personas que padecen de tendinitis y afecciones reumáticas con edema de los miembros. Igualmente, se considera un alimento ideal para complementar el tratamiento de la gripe, la sinusitis o el catarro, debido a su acción proteolítica que disuelve las mucosidades, además de su contenido rico en vitamina C.

Gracias a que contiene bromelinas, una serie de enzimas digestivas encargadas de facilitar la descomposición de las proteínas y su absorción, se recomienda su consumo para mejorar el proceso digestivo.

Por otra parte, de acuerdo con el portal Lifestyle.fit se le conceden propiedades antioxidantes a la piña, que ayudan a eliminar el estrés oxidativo, a su vez que se fortalecen las funciones de los neuroconectores y retrasan el envejecimiento.

Pese a sus numerosos beneficios, los expertos recomiendan tomar precauciones a la hora de incluir la piña en la alimentación, ya que su consumo excesivo puede tener algunas contraindicaciones para la salud.

¿Qué pasa si se come piña a diario?

Según el portal Cocina Delirante, algunos de los riesgos de la ingesta diaria de piña se relacionan con comerla en grandes cantidades y todos los días. Entre algunas de las molestias que puede ocasionar se enlistan:

  • Al tratarse de una fruta muy dulce, se aconseja regular las porciones de piña que se consumen, para evitar incrementar los niveles de azúcar en la sangre.
Al tratarse de una fruta muy dulce, se aconseja regular las porciones de piña que se consumen, para evitar incrementar los niveles de azúcar en la sangre.
  • Si bien las bromelinas se destacan por sus beneficios para la digestión, además por contribuir a eliminar las células cancerígenas del cuerpo, si se ingieren en grandes cantidades pueden producir sangrados más intensos durante la menstruación, así como diarrea, náuseas y vómito.
  • Igualmente, al ser una enzima que adelgaza la sangre, no se recomienda el consumo de piña en grandes cantidades en personas que tomen anticoagulantes, ya que puede generar sangrado nasal, dolor en pecho y otras molestias.
  • Por otra parte, comer demasiada piña puede llevar a reacciones por sobredosis de vitamina C, temblores o enfermedades hepáticas por el consumo de manganeso y diarrea, ya que se excede en la cantidad de vitaminas y minerales necesarios para el cuerpo, generando una reacción contraria.
  • Tampoco se aconseja su ingesta en personas que sufran gastritis y/o úlceras gastroduodenales, puesto que la piña contiene importantes niveles de ácidos, además de estimular la producción de jugos gástricos.

Tenga en cuenta que estas contraindicaciones apelan sobre todo a un consumo excesivo en la dieta diaria y que, en todo caso, se recomienda consultar al médico para llevar un estilo de vida más saludable y conocer el tratamiento adecuado para cada situación de salud particular.