De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus) la vitamina C es hidrosoluble, lo que quiere decir que, se disuelve en agua y es importante para el cuerpo, porque colabora con su crecimiento y desarrollo.
La enciclopedia médica señala que es importante consumirla a través de alimentos como el melón, el mango, la papaya, la piña, la naranja, la fresa, entre otras frutas, incluyendo en un plan de alimentación con vegetales, como la espinaca, el repollo, el tomate, entre otros. “El cuerpo no puede producir la vitamina C por sí solo, ni tampoco la almacena”, añade MedlinePlus.
A través de su servicio en línea, la Biblioteca menciona que dentro del grupo de beneficios de la vitamina C se encuentra su capacidad para reparar los tejidos del cuerpo; asimismo, participar en el proceso de cicatrización y absorción de hierro, reduciendo el riesgo de anemia, respectivamente.
No obstante, la creencia popular señala que el consumo de suplementos de vitamina C podría reducir el riesgo de gripes, pero un comentario de la enciclopedia médica, señala: “La investigación muestra que, para la mayoría de las personas, los suplementos de vitamina C o los alimentos ricos en dicha vitamina, no reducen el riesgo de contraer el resfriado común”.
Según la experta, Katherine Zeratsky, a través de un informe de la Clínica Mayo, señala que el consumo de vitamina C se puede obtener a través de una dieta equilibrada, por lo que sugiere una ingesta diaria de 75 gramos para las mujeres y 90 gramos para los hombres.
Además, cabe señalar que la vitamina C también se puede obtener a través de suplementos dietarios, por lo que el centro especializado puntualiza que “aunque es poco probable que un exceso de vitamina C en la alimentación sea perjudicial, grandes dosis de suplementos de vitamina C”, pueden ocasionar diarrea, náuseas, dolores de cabeza, y acidez estomacal.
No obstante, se puede considerar que las vitaminas, al ser nutrientes esenciales para el cuerpo, se pueden mezclar entre sí; pero un artículo de Mundo Deportivo difiere con esto, explicando, por ejemplo, que el consumo de hierro no es aconsejable junto con productos lácteos que contienen calcio.
No obstante, el hierro junto con un zumo de naranja, rico en vitamina C, puede ser ideal porque ayuda con la absorción de este mineral.
Asimismo, MedlinePlus señala que “usualmente se toma una vez al día o según las indicaciones de su médico. El ácido ascórbico (vitamina C) está disponible sin receta, pero su médico puede recetar ácido ascórbico para tratar ciertas afecciones”.
Por su parte, El Confidencial no sugiere una ingesta de alimentos como el limón y la naranja, que contienen vitamina C, con el estómago vacío, es decir en ayunas, porque al tener ácido tánico inciden en complicaciones gástricas.
¿Pero qué pasa si se consume en exceso vitamina C?
Tal y como se mencionó, la enciclopedia médica asegura que el consumo excesivo de esta vitamina podría causar trastornos digestivos o diarrea.
“Los efectos secundarios serios a causa de demasiada vitamina C son muy infrecuentes, porque el cuerpo no puede almacenar dicha vitamina. Sin embargo, no se recomiendan cantidades superiores a 2,000 mg/día”, agrega.
No obstante, tener un déficit de vitamina C podría causar anemia, gingivitis, sangrados nasales, cabello reseco, entre otros.
Cabe precisar, que el consumo de vitaminas al mismo tiempo, señala la enciclopedia médica, se denomina sobredosis multivitamínica, que puede ser tóxico para quien las consume.
Los principales síntomas que presenta una persona que tiene dicha sobredosis son: ganas de ir al baño con frecuencia, irritabilidad en los ojos, cambios de humor, dolores de cabeza, fatiga, molestias musculares, por lo que se recomienda inmediatamente dirigirse a un centro médico, ya que esto puede causar hasta la muerte.